Claves para ser cada vez más sostenible en tu empresa y tu hogar
Alba Cañadas, concejala de Medio Ambiente cuando Vitoria-Gasteiz recibió el premio Green Capital, es la conciencia ambiental de empresas e instituciones
Alba Cañadas se ha convertido en la conciencia ambiental de empresas e instituciones. Fue la Concejala de Medio Ambiente cuando Vitoria obtuvo el título Green Capital y ahora traslada a otros su experiencia en sostenibilidad. Su consultoría Desarrolla Sostenible ayuda a empresas e instituciones a mejorar la sostenibilidad en todas sus vertientes.
Alba Cañadas quiere dejar claro que "la sostenibilidad no es un fin en sí mismo, es un camino, es una mejora continua y una necesidad constante de seguir poniéndote retos y seguir mejorando". La sostenibilidad tiene que mantener un equilibrio entre la parte social, económica y ambiental. Y ese logro no siempre implica gasto o inversión económica, también puede ser simplemente un ahorro.
Lo mejor es, en cualquier caso, ir poco a poco, y analizar cada caso de forma individual: "Hay que hacer lluvia fina y que el destinatario vaya entendiendo la filosofía. No puedes defender posiciones maximalistas, porque creas rechazo". La clave es que el mensaje cale.
Eso sí, Cañadas insiste en que, por sí mismo, "nadie puede ser sostenible; cada uno en la medida de sus posibilidades podrá adoptar buenas prácticas que le permitan consumir menos, utilizar menos residuos, utilizar menos agua en sus procesos..." Y aquí el dinero no es siempre importante: lo primero y lo vital es la concienciación.
La sostenibilidad es un camino de mejora continua y un compromiso
La sostenibilidad pasa en primer lugar por la formación y la información: "Hay que sensibilizar a las personas y que se hagan corresponsables en la parte que les toca". Cañadas destaca la fuerza que cada uno tenemos como consumidor: "Si yo sé que alguien fabrica con aceite de palma, pues digo que no compro más porque afecta al Medio Ambiente".
El mayor orgullo para Cañadas es cuando sus asesorados asumen las nuevas prácticas. En ese momento sabe que no habrá marcha atrás: "Es como la Ley Antitabaco, que despertó polvareda en sus inicios, pero hoy nadie se imagina fumando en bares o reuniones".
La sostenibilidad ambiental está unida a la social y a la economía
- Triple R
La sostenibilidad también tiene otra pata en la 'triple R': reducir, reutilizar y reciclar, como principio de la economía circular: "Hay que intentar que no generemos residuos y que los que generemos puedan convertirse en productos y materia prima para otras empresas": un ejemplo es las ruedas de los desguaces, que acaban siendo utilizados como caucho en los parques infantiles.
Este ejemplo se puede explicar en una familia: "Si compras magdalenas empaquetadas todas juntas, y no de 1 en 1, reduces el plástico que has comprado, luego la bolsa la puedes reutilizar para meter el bocadillo y tercero la reciclas en el contenedor cuando no tiene más uso: Hay que llenar lo menos posible los vertederos".
- Empleo Verde y agenda 21
El Empleo Verde es otra de las patas de Desarrolla Sostenible: "Cualquier posibilidad de generar riqueza y empleo en nuestro entorno, con el menor impacto negativo posible, eso es empleo verde". "Si en el pueblo tenemos una ermita preciosa con un sendero precioso y lo recuperamos, la gente se queda en el pueblo y a dormir en las casetas rurales ahí estamos generando tejido económico a través del patrimonio cultural que tenemos".
En cada empresa analizamos la situación de partida y hasta dónde queremos llegar
En empresas e instituciones es necesario entender que cada empresa puede llegar a un nivel de sostenibilidad, pero todo avance es positivo. La "lluvia fina" de la que habla Cañadas es lo que acaba calando en la empresa: "Si vas directamente a por un premio o certificación, eso te puede dar imagen de marca, pero no sensibiliza".
Si llega ese reconocimiento siempre es bienvenido, pero el objetivo es "dar pasos para mejorar el ambiente, aumentar la productividad, reducir los residuos..." Todo ello, insiste Alba Cañadas, "sin que esto suponga un incremento abismal del precio que pueda hacer perder competitividad".
En Vitoria-Gasteiz hay un gran nivel de exigencia medioambiental y por eso todo nos parece poco
- Concejala de la Green Capital
Alba Cañadas fue la máxima dirigente medioambiental de Vitoria-Gasteiz durante la concesión del título de Green Capital. La campaña Verde por Fuera, Verde por Dentro generó un sentimiento de ciudad pocas veces visto hasta entonces: "Se generó un orgullo de ciudad y una sensación de todos a una que pocas veces se puede vivir. El éxito estuvo en todas partes, todos los grupos se implicaron y lo vieron como un éxito suyo".
"Vitoria es verde por fuera y por dentro, y te das cuenta cuando haces la comparativa con otros sitios". El bendito problema de la sostenibilidad es que la exigencia va en aumento: "Todo nos parece poco y nos parece que los hacemos mal, pero no tienes más que salir para ver que tenemos un buen nivel de sensibilización ciudadana y de actuaciones".
- ¿Ha supuesto la crisis freno para la sostenibilidad?
"Antes de la crisis había más subvenciones, pero ahora se ha hecho de la necesidad virtud. Si antes tenías que convencer a alguien de que no era necesario el aire a 17 grados ahora recurres a lo económico, porque te duele el bolsillo y te los ganas por ahí".
En los municipios más pequeños el problema aumenta por la falta de personal especializado: "Hay que buscar la planificación sostenible, que se pueda generar una vida y que no se acabe cuando las últimas personas mayores vayan faltando".
En Desarrolla Sostenible buscan ayudar a estos municipios rurales, donde en la mayoría de los casos "el alcalde está con el tractor por las mañana y por la tarde va al ayuntamiento".
- Empresaria
Alba Cañadas puso en marcha este proyecto hace tres años. Lo hizo como autónoma, con una inversión económica mínima que le permitió afrontar este reto. "Creía que tenía un proyecto útil para la sociedad y además el no tener que dar cuentas a nadie es estimulante", explica sobre sus inicios.
Cañadas reconoce que, como todos los autónomos, sufre esa montaña rusa que le lleva algunos días a querer tirar la toalla y, al siguiente, a disfrutar del trabajo como la que más. "El orgullo ahora es inmenso porque aquí eres tú la que estás sola ante el peligro".
Acudió a Ampea hace año y medio: "Necesitaba no sentirme sola y buscar apoyos, estaba segura de que aquí los iba a encontrar". Desde entonces pertenece a la asociación de mujeres empresarias de Álava.
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