Una huerta 'secreta' de 3.500 metros cuadrados en pleno centro de Vitoria

23 agosto, 2017

Habas, pimientos, lechugas, tomates, cebollas, puerros, cardos, patatas y vainas crecen a 100 metros de la Plaza de la Provincia

IMG_20160620_120215¿Sabes que en pleno centro de Vitoria hay una huerta de casi 3.500 metros donde se cultivan todo tipo de hortalizas? Un gran campo verde ubicado en la parte posterior del antiguo Convento de las Brígidas, entre Urkide, Landazuri y el Obispado.

Esta huerta es un programa de inclusión de empleo para trabajo agrícola que desarrolla Cáritas Vitoria. Los trabajadores de estas huertas son personas a las que se les ofrece la experiencia necesaria para, posteriormente, poder dedicarse laboralmente a las tareas agrícolas.

La huerta está gestionada por trabajadores en riesgo de exclusión y los productos se venden en la Plaza de Abastos

La plantilla de la huerta de las Brígidas está dirigida por un capataz agrícola encargado de llevar el grupo de trabajo. Bajo su supervisión hay siete personas, divididas en voluntarios y trabajadores, que se encargan de los trabajos agrícolas.

Algunos de ellos tienen contrato de hasta 3 años, y cobran la mitad de un salario medio interprofesional, ya que trabajan por las mañanas, a media jornada.

IMG_20160620_120449A pesar de estar en el centro de la ciudad, la huerta está en proceso de ser ecológica, y cultiva los mismos productos que cualquier otra huerta del territorio alavés: habas, pimientos, lechugas, tomates, cebollas, puerros, cardos, patatas y vainas.

En el huerto aún sobreviven antiguos manzanos y un peral, memoria viva del antiguo convento.

La zona está abierta al público todas las mañanas hasta la 13:30, entrando por un acceso lateral de Muebles Bonilla. Además esta época del año es la mejor para disfrutar del colorido que ofrece el crecimiento de las diferentes hortalizas que se cultivan.

Lo cultivado y recogido en esta huerta termina su proceso en un puesto de ventas en la Plaza de Abastos, y a partir de este mes, también se venderán en el mercado de los jueves y sábados de Santa Bárbara.

Esta zona siempre había sido propiedad de las monjas del Convento de las Brígidas, pero cuando abandonaron el convento, el suelo se quedó a cargo del Obispo, quien ofreció las tierras a Cáritas para que éstos pudiesen
llevar a cabo alguno de sus proyectos de inserción.  Cuando Cáritas conoció el recinto en verano de 2014, se encontraron con "un zarzal". Su reconversión ha devuelto el explendor a la zona y ha permitido reaprovecharlo.

AIMG_20160620_121552demás del suelo, Cáritas ha reformado una de las partes del edificio para uso exclusivo de los trabajadores. Esta infraestructura cuenta con varias salas, donde los trabajadores recogen los artilugios de trabajo una vez finalizada su jornada laboral diaria y donde guardan el producto recogido fruto de la cosecha.

El edificio cuenta con una segunda planta, donde se encuentran los vestuarios de los trabajadores y una segunda aula donde los trabajadores tienen sus clases teóricas en las épocas que no se puede cultivar la huerta.

"La mayoría de nuestros trabajadores tiene problemas con el idioma español, por lo que intentamos que las clases sean lo más dinámicas posibles y que los libros sean más visuales, con el fin de facilitar el aprendizaje", explica a Gasteiz Hoy el Secretario General de Cáritas Vitoria, Ramón Ibeas.