La Policía acusa al presidente de ATEA de alterar el orden público en la Carrera de Burros

El presidente de ATEA, Kepa Tamames, ha recibido una denuncia policial por su actuación el pasado 25 de julio en los momentos previos a la Carrera de Burros. Antes de que arrancase el evento el denunciado intentó acceder a la zona reservada a blusas y medios de comunicación. Tras ser expulsado del lugar por los agentes policiales, Kepa Tamames continuó grabando todo lo que acontecía "de forma impropia", según recoge el atestado policial.

Este mismo atestado, que el propio Tamames ha trasladado a los medios, recoge asimismo que  se negó a identificarse en varias ocasiones tras los requerimientos de los agentes "alegando que la carrera de burros era ilegal y exigiendo a los agentes que impidieran su celebración". Los agentes aseguran asimismo que el propio Tamames intentó sin éxito exaltar al resto de los congregados, a viva voz, gritando y alterando el orden público".  Además, el atestado asegura también que Tamames calificó a los policías de "peleles del alcalde".

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Una vez identificado "el expedientado trató en varias ocasiones de entorpecer la carrera, por lo que los agentes tuvieron que protegerle, ya que el resto de la multitud presente se había hecho eco de sus acciones y provocaciones y algunas personas intentaban enfrentarse con él".

Al mismo tiempo desde los grupos animalistas se ha remitido una queja formal contra la Policía Local. Según aseguran en la queja, durante la carrera se incumplieron varios puntos de la normativa, que exhibieron a los agentes sin que éstos actuasen. Además, desde ATEA denuncian que al menos dos de los agentes contestaron que "esfaban sllí para defender a las personas y no a los Animales".

el comportamiento de los agentes con los que tuvimos que tratar nos pareció del todo inadecuado, por cuanto no atendieron en ningún momento a nuestros requerimientos, al tiempo que no hicieron nada por garantizar nuestro derecho a documentar un evento público, como de hecho hacían cientos de personas en la plaza. Debido a tan inapropiada actitud, ATEA interpuso ante la Policía Local una queja formal a los pocos días.

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ATEA también asegura que "nada de lo que asegura la Policía es verdad, pues de ser así (tratando “en varias ocasiones de entorpecer la carrera”, profiriendo descalificaciones hacia los agentes, negándose a ser identificado, o “intentando marchar entre los burros”), el autor hubiera sido detenido de inmediato, como dicta la lógica más elemental. Los medios de comunicación no recogieron en sus crónicas ni una sola imagen que demuestre lo que los cuatro agentes de la autoridad afirman en su informe".

ATEA también acusa a los policías de "no velar en absoluto por garantizar nuestro derecho a documentar el acto, haciendo además caso omiso al requerimiento de una ciudadana que afirmó haber sido agredida con un bastón por un señor mayor en un hombro".

La Comisión de Blusas había decidido celebrar este año una carrera de burros en la que primase el respeto a los animales. Los pollinos llegaron en dos camiones, desde donde aparcaron posteriormente en lo alto de la plaza. Durante la carrera este año sólo el jinete tuvo oportunidad de tocar al burro.