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Vecinos de Sansomendi denuncian un fuerte olor "que recuerda al pescado podrido"

Aitor Sancho 22 febrero, 2016

El Ayuntamiento atribuye el olor a los desechos de una pescadería y los vecinos creen que puede ser de alguna fábrica cercana

Un fuerte olor envuelve Sansomendi y sus alrededores desde hace varios meses. Este lunes el hedor ha alcanzado desde primera hora de la mañana mayor intensidad que en días anteriores, según denunciaba la asociación de vecinos del barrio a Gasteiz Hoy. “No podemos ni ventilar la casa, aunque sea durante poco rato, porque el tufo se mete dentro y apesta todas las habitaciones”, lamenta una vecina del portal 6 de la calle Paula Montal. Este martes el Ayuntamiento se ha comprometido a estudiar la causa del problema, tras la petición de Irabazi.

El mal olor, que “recuerda al del pescado podrido y plásticos tratados”, se hace notar más o menos en función de las condiciones meteorológicas, pero “siempre está presente, a menudo por todo el barrio y no en zonas concretas”. Por ejemplo, el frío de hace dos fines de semana suavizó este desagradable olor, que parece aumentar con el buen tiempo, y la redujo al parque de Sansomendi, cercano al área industrial de Ali Gobeo.

Para denunciar esta situación, la asociación de vecinos del barrio interpuso una queja en el Ayuntamiento de Vitoria hace cuatro meses. Y ha expuesto su descontento a través del servicio VGarbi y del buzón ciudadano. La asociación de vecinos también trasladó su inquietud a la Policía Local en la reciente reunión anual que mantuvo con la guardia urbana para tratar ciertos temas que afectan a Sansomendi. Hasta ahora, no ha obtenido respuesta oficial.

Un portavoz autorizado del Ayuntamiento confirmó a Gasteiz Hoy que existen al menos cinco quejas en el Departamento de Medio Ambiente en relación al hedor que envuelve el barrio. Asimismo, y tras pasarse un técnico municipal por la zona, el Consistorio identificó un contenedor situado frente a una pescadería de la calle Sansomendi como fuente del problema. “El técnico de Medio Ambiente ha observado un olor penetrante en el depósito de los desechos, que con el tiempo se ha impregnado de la sangre del pescado”. Por eso, desde el Consistorio señalaron que se iba a llevar a cabo una limpieza en profundidad de este contenedor, ya que la pescadería no incumple ninguna normativa, como explican en el buzón ciudadano para responder a una queja de 2009.

Sin embargo, el desagradable olor persiste a día de hoy. Y desde la asociación de vecinos niegan que se trate del contenedor señalado o de otros restos de basura. Alegan que, en otros puntos de la ciudad donde se realizan cargas y descargas de grandes cantidades de pescado, el olor se concentra en una zona cercana y acotada pero no se extiende por todo el barrio y sus alrededores. En este sentido, apuntan hacia las fábricas de Ali Gobeo. En concreto, a las que se dedican al tratamiento de plásticos, ya que en este proceso se aplican unos polímeros termoestables industriales llamados aminas, que se utilizan para la fabricación de adhesivos, almacenamiento de alimentos o moldeados eléctricos y desprenden un hedor similar al del pescado estropeado.