109 miembros de la familia Porras eligen Vitoria para su encuentro bienal

4 mayo, 2015

Los miembros de la familia Porras residen en Madrid, Barcelona, Burdeos, Japón, EEUU o Vall d'Arán

Foto de la Familia Porras en VitoriaEl aluvión de festivos durante el mes de abril en las provincias vecinas ha beneficiado al turismo en Vitoria. Incluso, este último puente de Mayo varios hoteles rozaron el lleno, especialmente el jueves y viernes. Cientos de turistas que han visitado Vitoria procedentes en gran parte desde Madrid, pero también desde destinos como Zaragoza, donde Vitoria ha realizado una campaña de promoción.

Ana Lasarte, directora de Turismo, advierte además de que los datos de visitas a la Oficina de Turismo sólo suponen una parte de las visitas: "La ocupación se ha visto en la calle y no todos los que nos visitan pasan por la Oficina". El viernes y sábado se reforzaron las visitas guiadas para atender a todos los visitantes.

  • Reunión Familiar de 109 miembros

Por cierto que entre todos los que han acudido a Vitoria este fin de semana destacan 109 miembros de una misma familia: la familia Porras. En realidad la familia es mucho mayor, y llega casi a los 400 miembros, repartidos fundamentalmente por Madrid, Burdeos, Barcelona y Vall D'Arán, pero también por Vitoria Japón o EEUU. Sin embargo no todos ellos pudieron acudir.

Toda la familia procede de una saga de 8 hermanos, de los cuales sólo viven dos, aunque a la cita tan sólo pudo acudir uno de ellos: Rafael, de 86 años. La familia se reúne cada dos años. La última vez lo hicieron en una localidad del prepirineo y dentro de dos años tocará probablemente Francia, pero en 2015 la sede de esta cumbre familiar ha sido Vitoria-Gasteiz.

PorrasEl organizador de esta edición ha sido Tònho, un Porras que vive a caballo entre Vall d'Arán y Vitoria-Gasteiz. El servicio de Turismo proporcionó a la familia sus propios guías turísticos y gracias a los conocidos prepararon su programa de actividades. Divididos en dos grupos, iban generando expectación allí donde iban: "La gente nos preguntaba si de verdad éramos de la misma familia".

La familia también bailó su aurresku a la Virgen Blanca, con Txapela dedicada para el más longevo de la familia. También disfrutaron del vermú en la Plaza de España y la fiesta central tuvo lugar en el restaurante Aldaia en Júndiz. Eso sí, la magnitud de los invitados al banquete provocó algunos problemas en la búsqueda de local: "Cuando queríamos reservar en restaurantes se pensaban que era comunión o boda". La fiesta familiar en este caso se prolongó hasta altas horas de la mañana.

¿Y dónde se alojan 109 personas? Desde hace casi dos años el Albergue de la Catedral ya estaba reservado por completo para esta familia, aunque los más mayores durmieron en hoteles. Y es que la organización de un evento así, de unas dimensiones similares a las de un Congreso, no puede hacerse de la noche a la mañana.