Zaramaga y Ariznabarra: dos barrios de oro adaptados a los nuevos tiempos

4 marzo, 2017

El Ayuntamiento busca una radiografía de este barrio de oro

El Ayuntamiento prosigue este mes, en los barrios de Zaramaga y Ariznabarra, los estudios sociológicos y urbanísticos de los considerados “barrios de oro” de Vitoria-Gasteiz, cuya construcción es mayoritariamente anterior a 1980 y cuyos edificios presentan en términos generales problemas de accesibilidad a sus portales o sus viviendas, escaso o nulo aislamiento y presencia puntual de patologías y humedades en fachadas.

Además, el envejecimiento de la población, el alto nivel relativo de paro y de personas atendidas por servicios sociales en estos ámbitos, en comparación con el resto de la ciudad, hace que sean considerados como zonas vulnerables dentro de la estructura urbana de Vitoria-Gasteiz.

Finalizado el trabajo de campo en Coronación, los equipos de sociólogos y urbanistas recorrerán estas semanas los barrios de Zaramaga y Ariznabarra. Más adelante, y a lo largo de este mismo año, llegará el turno de los barrios de Adurtza y Abetxuko, cuyos estudios socio-urbanísticos se encuentran ahora en fase de contratación.

Para la obtención de una radiografía real de la situación actual de estos barrios, se realizan  entrevistas a los vecinos y comerciantes, por un equipo de sociólogos, debidamente acreditados, unido a la realización de visitas técnicas a los edificios y espacios públicos, realizadas por arquitectos, urbanistas y paisajistas.

Además de las encuestas al vecindario y a los propietarios de los negocios; el equipo de urbanistas y de análisis sociológico tienen previsto entrar en contacto con responsables y miembros de las asociaciones de estos barrios: asociaciones de vecinos, comerciantes, hosteleros y otras de diversa índole.

  • Sobre Zaramaga

El barrio de Zaramaga ocupa una superficie total de 67,66 Has y una población de 11.953 habitantes. Su desarrollo urbanístico surge a partir del Plan Parcial de Zaramaga de 1959, completándose a finales de los 70 con la construcción de 5.200 viviendas en escasamente 20 años.

Zaramaga se concibió como un barrio obrero en el que alojar a los trabajadores de los polígonos industriales adyacentes, sobre los que se instalaron empresas importantes como Forjas Alavesas y Michelín.

Zaramaga se ha sabido reconvertir y adaptar a los nuevos tiempos. El matadero es hoy un Centro Cívico, la Central Lechera dejó paso a unas oficinas y Sidenor pasó a ser un Centro Comercial. El arte de los murales está por muchas de las calles y la vida sigue en sus calles. El mercado de Reyes de Navarra es, junto con Las Hebillas, uno de los más concurridos.

El parque residencial actual asciende a 5.642 viviendas, de las que 98% poseen mas de 30 años y, entre ellas, el 19% del total fueron construidas hace más de 50 años. Se trata de viviendas de pequeño tamaño (entre 60 y 70 m2),  albergadas en edificios de tipología de bloque abierto, carentes de plazas de garaje en mas del 80% de ellos.

  • Sobre Ariznabarra

En lo que respecta a Ariznabarra, el barrio ocupa una superficie total de 39,60 Has y una población de 7.838 habitantes.  El parque residencial actual asciende a 3.400 viviendas, de las que el 49% poseen mas de 30 años y, entre ellas, el 21% del total fueron construidas hace más de 50 años.

En sus orígenes, el barrio de Ariznabarra surge a partir de los años 50, para dar respuesta a la necesidad de alojamiento de los trabajadores que venían de otras comunidades a trabajar en las fábricas situadas en su entorno. Ajuria, Aranzabal y Areitio eran las empresas más cercanas, de las que se nutrían estas viviendas.

Entre los años 1958 y 1965 se construye la práctica totalidad del denominado Poblado de Ariznavarra, con más de 600 viviendas. Se trata de edificios de 4 y 5 alturas que albergan viviendas de muy pequeño tamaño y carecen de ascensor, garaje y trastero.

Prácticamente en el mismo periodo, surge otro enclave residencial en Portal de Castilla y ya en la década de los 80, se produce una importante expansión del barrio, hasta completar su configuración actual, una década después. Es un barrio de contrastes, con grandes cambios entre una calle y otra: desde Portal de Castilla hasta las vías del ferrocarril y la antigua Circunvalación o la Rotonda de la Antonia.