La dueña de la casa ocupada por 'Los Pichis' vive en una habitación que le ha cedido una vecina

Arantxa, dueña legítima de la casa ocupada por 'Los Pichis', es la principal víctima de esta problemática que ha movilizado a Abetxuko. Recientemente ha tenido que abandonar por motivos personales su trabajo como cuidadora de una persona mayor en el barrio. Sin embargo, la anciana con la que se alojaba por motivos laborales "le ha prestado una habitación para que pueda seguir viviendo en su piso".

Con su vivienda ocupada por el clan gitano, "una situación económica que ha empeorado tras tener que dejar su trabajo" y "sin ningún familiar en Vitoria", esta mujer de 54 años "no ha tenido más opción" que aceptar la generosidad de esta vecina de la tercera edad. La anciana "ha contratado a otra persona" en el puesto de Arantxa. 

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"Como se encuentra sola, le gente del barrio se propuso echarle una mano. Y se han juntado unos cuantos vecinos que están todo el día con ella". La mujer está actualmente en trámites para solicitar las AES y la RGI, aunque inicialmente fuentes de la asociación aseguraron que se les había denegado el acceso a estas ayudas.

Aunque la casa de Arantxa no reúne las condiciones de habitabilidad debido a una ocupación anterior a la de 'Los Pichis', la propietaria no ha tenido la oportunidad de hacer ninguna mejora. Primero, unos individuos del barrio aprovecharon que la mujer vivía con una anciana que cuidaba a tiempo completo para apropiarse durante casi un año de la vivienda situada en el número 54 de la calle El Cristo. "Cuando Arantxa quiso volver a su casa, se encontró con que ya había gente viviendo en ella".

Por eso, puso "una denuncia en febrero y otra en mayo de este año", según explican representantes vecinales, para echarlos. Finalmente, fue "la plantación de marihuana que los okupas tenían en la casa" lo que permitió a la policía efectuar su desalojo. Sin embargo, dejaron la vivienda de Arantxa totalmente destrozada y una deuda de 7.500 euros en la factura de la luz. Y no sólo eso. Al parecer, según relatan las mismas fuentes, "vendieron por 150 euros la llave" del inmueble a 'Los Pichis'.

Desde principios de agosto, varios miembros del clan gitano procedente de Bizkaia, entre ellos algunos menores, se han establecido ilegalmente en la casa de Arantxa, que no reúne las condiciones de habitabilidad. Por eso, decía 'La María', matriarca de 'Los Bartolos', que "les hemos hecho un favor a los dueños al arreglar la casa". Desde la asociación de vecinos ya explicaban las razones de este deterioro en la carta remitida a 'Los Pichis' a través del concejal de Políticas Sociales, Peio López de Munain.

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"Entre la desagradable ocupación anterior y la que ahora ustedes llevan a cabo, los propietarios no han podido acceder a su propia casa para emprender las mejoras correspondientes. Ha sido su entrada lo que lo ha impedido. Por eso, la casa se encontraba sin tocar, tal y como la dejaron los impresentables anteriores (llena de tierra en la parte superior, agujeros para la ventilación en paredes y techos, sin fregadero, llena de pintadas y con unas facturas de luz y agua de escándalo, etc.)", recoge la carta.

Arantxa puso una denuncia por vía penal contra esta segunda ocupación al poco de perpetrarse. Aun así, hasta el lunes no se asignará el juzgado que llevará el caso, como avanza Diario de Noticias de Álava. Otros dos herederos de la casa ocupada, sobrinos de Arantxa, vinieron a Vitoria a principios de octubre desde su lugar de residencia en Zamora para registrar en el Juzgado una medida cautelar que aceleraría el proceso de desalojo. A la denuncia de la propietaria del inmueble se une también la de la panadera por agresiones y amenazas.

• Visita del fiscal superior del País Vasco

Arantxa coincidió el pasado miércoles con fiscal superior del País Vasco, Juan Calparsoro, en el taller de manualidades que se realiza en barrio. Estas actividades, a las que acude acompañada por otras mujeres del barrio, se desarrollan en los locales de la asociación de vecinos Uribe Nogales. De esta manera, Arantxa pudo contarle en persona al fiscal su desafortunada historia. "Se quedó alucinado", explican testigos presenciales.

Calparsoro, que se entrevistó en Bilbao con los Pichis el 28 de octubre, se acercó esta semana a Abetxuko para conocer de primera mano la situación que vive el barrio. "Le llamamos sobre las 14.00 horas del miércoles para invitarle a que viniera y, ese mismo día, a las 18.00 horas, se presentó en el barrio". En la visita, que duró "una hora y media", el fiscal paseó por Abetxuko acompañado por cuatro representantes de la asociación de vecinos. "Preguntó y escuchó mucho".

En el recorrido, "pudo apreciar cómo otros vecinos han tapiado sus casas ante el temor de nuevas ocupaciones por parte de 'Los Pichis'. También pudo constatar el modo de vida tranquilo que caracteriza al barrio y la convivencia pacífica con otras familias gitanas", explica Oskar González de Abetxuko, presidente de la asociación de vecinos Uribe Nogales.

Y pasó por delante de la casa de Arantxa, donde "coincidió en la calle con sus ocupantes, que le saludaron". En cuanto a la agilización del proceso de desalojo, Calparsoro "nos explicó que la resolución del conflicto depende del juez de turno, pero que está pendiente del caso". Asimismo, "le dejamos claro que la actuación vecinal ha impedido el desembarco de nuevos miembros de 'Los Pichis' para instalarse en otras casas".

Oskar también le habló del encuentro que mantuvo el sábado pasado con el yerno y los cabezas de familia del clan gitano dentro de la casa de Arantxa. En esta reunión "se llegó a un acuerdo de respeto mutuo" hasta que se efectúe el desalojo. "Se comprometieron a no armarla para que no se produzca ningún altercado, que no les conviene a ellos ni a los vecinos. Eso sí, también se les dejó muy claro que no hay ninguna posibilidad de que se queden en la vivienda que ahora ocupan", destaca Oskar.

Por otra parte, Sos Racismo Araba y Ongi Etorri han solicitado mediante un escrito la comparecencia de los cabezas de familia que ocupan la casa de Arantxa ante la Comisión de Derechos Humanos e Igualdad del Parlamento vasco. A título informativo, han remitido a otros organismos este mismo texto, donde hablan de "continuadas acusaciones, coacciones y actitudes inaceptables por parte de la vecindad de Abetxuko, en forma de concentraciones vecinales".

• Manifestación de este sábado

En concreto, el escrito ha sido remitido al Departamento de Alcaldía y Relaciones Institucionales (Servicio por la Convivencia y Diversidad del Ayuntamiento de Vitoria), a los grupos municipales en el Ejecutivo local, al Ararteko, al Síndico y a la Diócesis de la capital alavesa. Esta maniobra llega tras la solicitud de empadronamiento por parte de 'Los Pichis' en la casa de Arantxa. Se trata de una petición que, como explicaron desde el Ayuntamiento, no tiene mucho recorrido.

Los vecinos de Abetxuko celebraban este sábado a la tarde otra manifestación, similar a la del fin de semana pasado, que llegó hasta el centro de Vitoria. Una vez allí se leyó un documento en apoyo a Arantxa.