Vitoria acondicionará otros cinco caños del Casco Viejo

15 julio, 2022

Imprentas, Alhóndiga, Basajaun, Centro de empresas y Los Naranjos lucirán un nuevo aspecto

El Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz recuperará y acondicionará cinco nuevos caños del Casco Medieval. Así, estos espacios se fomentarán como recurso turístico. El consistorio destinará 106.382,72 euros para estos trabajos.

Concretamente, las actuaciones que se han previsto serán en los siguientes caños:

  • Imprentas.
  • Alhóndiga.
  • Basajaun.
  • Centro de empresas.
  • Los Naranjos.

El Casco Medieval de la capital alavesa cuenta con un total de 21 caños. De ellos 8 ya se han acondicionado. En los cinco en los que se va a actuar ahora se realizarán labores de consolidación, pintado de suelos y partes bajas de fachadas y muros, reparación de alcantarillado, colocación de barandillas y escaleras y se acometerá una instalación de agua corriente para limpieza y riego.

Una vez se completen estos trabajos, el Ayuntamiento proyecta colocar jardineras con plantas de diferentes especies para convertir estos caños en jardines interiores.

Caños medievales Vitoria Gasteiz San Miguel

La financiación para este proyecto se ha obtenido de fondos europeos. Servirá para avanzar en la recuperación de estos espacios singulares del Casco Medieval, "elementos de atracción turística que despiertan interés en las personas que visitan Vitoria-Gasteiz, y que, además, sirven para dar a conocer el patrimonio histórico y cultural de la capital alavesa", destaca el Ayuntamiento.

Caños medievales en Vitoria

Los caños eran las letrinas para las viviendas del Casco Medieval que, con la llegada del agua potable y el saneamiento, evolucionaron hasta convertirse en un foco de degradación. En 2007 el grupo ecologista Gaia presentó al Ayuntamiento una iniciativa para embellecer estos espacios.

Las autoridades la acogieron favorablemente. Así, asumieron las obras necesarias para su recuperación y disfrute por parte de las personas residentes en esta zona de la ciudad.

Visitar estos rincones históricos supone conocer cómo se vivía en las ciudades cuando en las casas no había agua. Por ello que todos los residuos orgánicos se arrojaban a los caños. Estos espacios tenían pozos de agua, que aunque no era potable, servía para la limpieza de las casas.

La lluvia arrastraba a las aguas fecales hasta los cantones. Estas aguas desembocaban en el río Zapardiel las de la ladera oeste y en el río de los Molinos las de la ladera este. De los pozos que había solo queda con agua el del Caño del Pozo, el resto están embocinados.

Llegada del agua potable al Casco Viejo

Entre 1880 y 1900 el agua potable llegó a casi todas las casas de Casco Viejo. Como consecuencia se empezaron a instalar váteres con desagües a los caños, que desde 1875 estaban ya embocinados, como consecuencia de la epidemia de cólera.

En 2007 se inició la recuperación de estos espacios

A partir de 1900 se cerraron y los caños empezaron a degradarse. Las personas residentes en el Casco Viejo arrojaban basura y empezaron a surgir construcciones ilegales ocupando el espacio público de los caños. Hay que tener en cuenta que, a diferencia de los patios que son de propiedad del vecindario, el espacio de los caños es propiedad del Ayuntamiento.

La sustitución de las puertas de roble por otras de chapa de hierro en 1970, además de un adecentamiento, fue la última intervención municipal antes de iniciar en 2007 la recuperación de los caños y su puesta en valor como un espacio. Algo que se hizo con plantas naturales y estéticamente agradable para el vecindario, además como un lugar que pudiera servir para diferentes usos.