Una soprano levanta pasiones desde su ventana en Lakua
La joven de 19 años Ainhoa Izaguirre ofrece pequeños conciertos a sus vecinos de la calle Estella-Lizarra
Cada tarde, en la calle Estella-Lizarra se producen dos rondas de aplausos a partir de las 20:00. Una para los sanitarios y otra para Ainhoa Izaguirre, que ofrece una auténtica exhibición de canto desde su ventana. Esta soprano de 19 años despliega todo su talento musical ante sus vecinos, que la esperan todos los días e incluso le piden canciones.
Sin embargo, la joven música no lo hace por los aplausos ni por el reconocimiento. Es su manera de relajarse, de alegrar el confinamiento a sus vecinos y de acordarse de los sanitarios que trabajan sin descanso. "El primer día que salí a cantar fue el día que murió una enfermera. Mi tía también es enfermera, y me afectó de manera especial", cuenta esta vecina de Lakua.
Desde entonces ha formado una curiosa alianza con sus vecinos de arriba: primero ella interpreta una de sus canciones a capela y después los vecinos ponen música para seguir animando a la manzana. Han creado una cuenta de Instagram (@estellalizarrasa) para recibir peticiones o subir sus sesiones.
- Formación musical desde los 4 años
Izaguirre no realiza sus demostraciones solo por entretenimiento o afición: es su auténtica pasión. Comenzó su formación musical a los cuatro años, cuando aprendió a tocar el piano en una academia. A los 8 siguió con sus estudios de piano en el conservatorio, completando después de muchos años un grado profesional de piano.
A los 14 años también comenzó las clases de canto, y actualmente estudia pedagogía musical en Musikene, el Centro Superior de Música del País Vasco. No se cierra ninguna puerta, pero su principal objetivo no es ser solista ni estar en los escenarios, sino ejercer como profesora de música en un conservatorio.
Y es que para Ainhoa ahora se está comprobando la importancia que tiene en realidad la música y su formación. "La música se valora menos que otras asignaturas en los colegios, y ahora está demostrando el valor que tiene y lo importante que es para animar a la gente". Ella lo seguirá haciendo, cada tarde, en la calle Estella-Lizarra.
Pero no es la única que intenta animar con música estos días de confinamiento. En Vitoria-Gasteiz hay muchos artistas que amenizan las tardes con instrumentos u otras voces, como la de la también soprano Estibaliz Arroyo.