Álava recauda un 4,6% menos

19 enero, 2012

Tal y como era de suponer, la recaudación de la Hacienda Foral cayó en 2011. En total se recaudaron 1.831 millones de euros; 84,6 menos que en 2010. Esta cifra supone un desfase de 206 millones respecto a lo estimado en las Cuentas forales de 2011, que preveían que la recaudación al cierre del pasado […]

Tal y como era de suponer, la recaudación de la Hacienda Foral cayó en 2011. En total se recaudaron 1.831 millones de euros; 84,6 menos que en 2010. Esta cifra supone un desfase de 206 millones respecto a lo estimado en las Cuentas forales de 2011, que preveían que la recaudación al cierre del pasado ejercicio ascendiera a 2.037 millones de euros. El mal dato refrenda, en todo caso, los ajustes y las medidas de control del gasto que el Gobierno que preside Javier De Andrés impulsó desde su llegada a la Diputación Foral de Álava el pasado mes de julio y que, de ningún modo, obedecían a una previsión alarmista, sino realista. Y es que, de no haberse tenido en cuenta esta realidad, la situación presupuestaria y financiera de las arcas forales sería hoy infinitamente más complicada.

De los 206 millones de euros de caída de recaudación respecto de lo previsto en el Presupuesto foral de 2011, 158 son imputables a la evolución negativa de los impuestos, 24’3 a la devolución del IVA de Rover y 23’2 millones a los desacuerdos entre los Gobierno Central y Vasco por la liquidación del Cupo de años anteriores. En lo que se refiere a los tributos directos, tan sólo el IRPF tuvo un comportamiento positivo –los ingresos se incrementaron un 5% respecto a 2010–, que no ha logrado compensar en todo caso la caída del Impuesto de Sociedades (-5,5%).

Asimismo, los impuestos indirectos –entre los que el IVA, que cae un 11,1% representa el mayor montante– también tuvieron una evolución negativa, motivada por la contención del gasto de las economías familiares, por el mayor crecimiento de las exportaciones frente al consumo interior o por el propio ‘caso Rover’.