Alfonso Alonso jura su cargo y ya es el primer ministro vitoriano de la democracia

Fotos: Casa Real, Ministerio de Sanidad y @alfonsoalonsopp

Alfonso Alonso ha asumido hoy el cargo de ministro de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad por el presidente Mariano Rajoy. El vitoriano, ex alcalde y portavoz del grupo parlamentario popular, ha recibido de manos de Ana Mato la cartera que le acredita como nuevo ministro. Alonso ha dedicado hoy el día a despedirse de sus compañeros en el Congreso de los Diputados, y a mediodía ha jurado su cargo en el Palacio de la Zarzuela en presencia de los Reyes de España.

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El vitoriano no entraba en ninguna quiniela, pero la apuesta de Rajoy por la juventud y por un hombre con marcado carácter político ha dejado descolocados a los analistas políticos.

Alfonso Alonso será de esta forma el primer ministro vitoriano de la democracia.  Hasta ahora el cargo de responsabilidad más importante de un alavés había sido asumido por Javier Rojo, presidente del Senado entre 2004 y 2011.

• Alcalde con 32 años

Alonso accedió como concejal al Ayuntamiento en 1996, con 29 años, en una decisión personal de Ramón Rabanera. Con 32 fue nombrado alcalde. Obtuvo 9 concejales, frente a los 7 del PNV de María Jesús Aguirre. En 2003 logró revalidar la alcaldía, empatando en escaños con el PNV, pero obteniendo mayor número de votos. Permaneció como alcalde durante dos legislaturas.

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Es licenciado en Filología Románica y Derecho. Fue el heredero de Cuerda al frente de la alcaldía, en unos años que estuvieron marcados por la crispación en la calle, pero en los que intentó entablar acuerdos y diálogo con todos los grupos. Alonso fue el primer alcalde no nacionalista de Vitoria-Gasteiz, y sufrió un fuerte acoso desde diversos ámbitos. Destaca en muchos la imagen de la agresión con huevos sufrida en 2006 en Celedón.

• Logros y fracasos

Pero, por encima de todo, Alfonso Alonso representó el inicio de la generación joven del Partido Popular Vasco. Apoyó claramente las bodas homosexuales y se convirtió en la referencia de su partido en Euskadi, aunque con un mensaje mucho más liberal que el que querían imprimir dirigentes como Iturgaiz, María San Gil o Jaime Mayor Oreja.

Además, entre los años 2000 y 2001 fue diputado por Álava en el Congreso de los Diputados, compatibilizando los cargos de alcalde y Diputado.

Bajo su mandato se produjo el inicio de la expansión urbanística de Vitoria-Gasteiz por Salburua y Zabalgana, se remodeló la Plaza de Toros y se construyeron los centros cívicos de San Andrés e Ibaiondo. También durante su mandato se realiza la reforma de la Virgen Blanca y arranca la construcción del tranvía. 

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Pero también se ofuscó en un proyecto de Auditorio que no vio la luz en el Paseo de la Senda. Además, en los últimos meses ha recaído sobre su figura la sombra de la sospecha por el contrato de alquiler de San Antonio. La oposición acusó a Alonso de favorecer al empresario y de "ir contra los intereses de Vitoria". La venta del Centro Comercial El Boulevard o los chalets de Ibaiondo también estuvieron en cuestión, sin que finalmente se haya determinado responsabilidad alguna.

• Apoyo de UA y PSE

Durante sus dos legislaturas contó con el apoyo de UA primero y puntualmente del PSE después. Precisamente el PSE de Patxi Lazcoz logró derrotarle en 2007. Ambos partidos obtuvieron 9 escaños, pero Lazcoz superó a Alonso en votos. Tras la derrota Alonso cedió el liderazgo de su grupo a Javier Maroto y puso rumbo a Madrid.

En las elecciones de 2011 que ganó Rajoy fue cabeza de lista por Álava para el PP. Tras ganar las elecciones Rajoy le nombró portavoz del Grupo Parlamentario Popular. Ahora asume el reto de gestionar el ministerio de Sanidad, un cargo que se puede entender como un regalo envenenado.

• Reto en Sanidad

Ana Mato, que se vio obligada a dimitir por su implicación en el Caso Gürtel, deja un ministerio que se ha visto afectado en los últimos meses por la crisis del ébola y la mala gestión. Pero no ha sido el único caso: el repago farmacéutico y los recortes en Sanidad han afectado a la imagen de la ministra. Ahora le corresponde a Alonso seguir por la misma línea o, en caso contrario, trazar el camino que le dicte Rajoy. Eso sí, asume la gestión de unas competencias descentralizadas, ya que la Sanidad está en mano de las autonomías.

Probablemente uno de sus mayores retos personales sea el de hacer valer la Ley Antitabaco. Alonso es un fumador empedernido, y ya fue pillado por las cámaras de Cuatro incumpliendo esta norma en un bar.

• Dependencia e Igualdad

Pero el ministerio de Sanidad lleva también aparejados los calificativos de Igualdad y Servicios Sociales. Esto se traduce en la gestión, entre otras cosas, de las Ayudas a la Dependencia, cuestionadas en los últimos años por los dependientes que ven cómo sus ayudas no llegan y se retrasan los pagos. Asimismo será el encargado de gestionar la lucha contra la Violencia Machista desde su ministerio.