Araski cae frente al Siglo XXI

10 noviembre, 2013

En esta ocasión, el Araski viajaba a Barcelona, a la ciudad de Esplugues, un largo viaje para enfrentarse a las chicas del Siglo XXI, un club de cantera con jugadoras jovencísimas (9 jugadoras de 16 años), pero con mucho talento individual, pertenecientes la mayoría a diferentes selecciones españolas, y con muchas horas de trabajo a […]

araski

En esta ocasión, el Araski viajaba a Barcelona, a la ciudad de Esplugues, un largo viaje para enfrentarse a las chicas del Siglo XXI, un club de cantera con jugadoras jovencísimas (9 jugadoras de 16 años), pero con mucho talento individual, pertenecientes la mayoría a diferentes selecciones españolas, y con muchas horas de trabajo a sus espaldas.

El partido tuvo dos caras opuestas: una en la que solo hubo un equipo sobre el campo, el Siglo XXI, por juego y por actitud; y otra en la que el Araski demostró al menos el nivel de intensidad y compromiso exigible a la categoría, jugando quizá un juego más directo, pero sobre todo compitiendo cada minuto de partido, indispensable si quiere dar el nivel en la categoría.

Si bien la consigna al inicio de partido era la de revertir la dinámica negativa del comienzo de los partidos anteriores, iniciando más enchufadas el encuentro, la entrada no pudo ser más fría, y los primeros minutos marcaban un 14-2 en el luminoso, que era una especie de deja vú, no solo por el resultado, si no por las malas sensaciones que transmitía el equipo. Precipitaciones, pases a los pies, canastas fáciles cedidas... y la impresión de que solo uno de los dos equipos estaba metido en el partido. Entre Calvo y Raventós, dos jugadoras muy incisivas durante todo el partido, las catalanas se repartieron la anotación para, a través de un juego sencillo pero fluido, abrir las primeras ventajas en el marcador (21-7 al final del primer cuarto).

A diferencia de otras veces, en el segundo cuarto tampoco se vislumbró reacción, y además de una defensa que recibía muchos puntos (triples rivales cuando las del Araski se ponían en zona, entradas fáciles cuando estaban en individual), con Salvadores de principal estilete ofensivo de las locales (20 puntos al final del partido), el atasco en ataque seguía siendo mayúsculo, y a las gasteiztarras les costaba encontrar vías de anotación, más allá de alguna canasta de Conde, que fue la mejor jugadora visitante del partido. Al descanso el marcador reflejaba la diferencia real del juego de la primera parte, 45-20.

El paso por vestuarios sirvió para cambiar el chip, y saber que pese a que las cosas estaban muy difíciles, el amor propio del equipo no debía permitir otros veinte minutos como los primeros. Se apostó por subir las líneas en defensa, ser más agresivas en las líneas de pase y no ceder canastas fáciles, a base de cambiar en todos los bloqueos y estar mucho más metidas en partido. En ataque, la consigna era simplificar las cosas, crear una ventaja y a partir de ella finalizar jugando ataques más breves y rápidos. Jugadoras veteranas del equipo como García-Sampedro o González dieron buenos minutos de juego y sobre todo carácter. Si bien no se consiguió anotar con fluidez, se paró la sangría en el marcador, y las chicas del Araski ganaron el parcial, llegando todavía muy lejos al final del tercer cuarto, 56-32.

El último cuarto el Araski tuvo algunos buenos minutos, siguiendo en la misma línea de los diez minutos anteriores, y tratando de que el resultado fuese menos abultado, y sobre todo acabar con mejores sensaciones, visto que remontar el partido por completo era muy complicado. Pese a eso, las visitantes no le perdieron la cara al partido, y jugando un juego menos vistoso quizá, pero competitivo al menos, lucharon hasta el final del partido, para acabar con un resultado de 74-54.

Es de alabar el buen juego de las jugadoras del Siglo XXI, jugadoras junior la mayoría, que jugaron con descaro y frescura, leyendo muy bien las ventajas que creaban a través de su movimiento del balón y del 1x1. Destacar que durante algunos momentos del partido, la media de edad de las jugadoras de ambos conjuntos en cancha era de 18 años, algo llamativo y al mismo tiempo de alegrar.

A partir de ahora, al Araski le tocan dos salidas muy complicadas consecutivas, Gernika y Alcobendas, en las que tendrán que intentar sumar la primera victoria de la temporada.