Los trabajadores de Residencia Ariznabarra denuncian la precariedad y la mala calidad en la cocina

11 mayo, 2018

La cocina de la residencia fue externalizada hace menos de un año

Los trabajadores del servicio de cocina de la residencia Ariznabarra han vuelto hoy a la calle para denunciar la precariedad y la mala calidad del servicio tras su externalización. "Hemos mantenido el servicio a costa de un sobreesfuerzo por parte de todos los compañeros", aseguran en un comunicado. El pasado mes de julio ya hubo movilizaciones contra esta externalización.

La empresa aseguró que tomaba la decisión para “ofrecer servicios excelentes a un precio competitivo”.  Pero los sindicatos ya advirtieron de que "no se puede comer todo un día con menos de lo que cuesta un Menú del Día".

Tanto los trabajadores como los familiares de los residentes han manifestado en el último año sus quejas por la pérdida de calidad del servicio.

Pese a las quejas y las críticas los trabajadores denuncian que tanto Diputación como Domus Vi (propietaria) se desentienden, y trasladan el problema a Medirest, gestora del servicio de cocina en dicha residencia

"En tres meses de baja de un compañero han pasado más de 20 profesionales, huyendo por el salario de pobreza 800€ y por la carga de trabajo", aseguran a modo de ejemplo.

Hoy los trabajadores de la residencia se van a concentrar tanto de 10h a 11h delante de la Diputación, y de 14:30h a 15:30h frente a la propia residencia.

Esta residencia vivió ya hace 6 años una huelga que se prolongó durante cerca de tres años, para reclamar condiciones dignas para los trabajadores y los residentes. La gestión perteneció hasta 2010 a Mapfre-Caja Madrid, pero ese año las residencias de este grupo fueron adquiridas por SAR.

Desde Diputación y Bienestar Social aseguran que ningún familiar se ha dirigido a ellos (verbalmente ni por escrito) para quejarse por el servicio de cocina.