FOTOS Y VÍDEO - Limpian a mano los 12.200 cristales del cielo de Artium

27 noviembre, 2024

La escultura que Javier Pérez creó en 2001, icónica de Artium, se desprende del polvo y recupera su luminosidad

¿Te imaginas limpiar a mano 12.200 cristales? Son los que componen 'Un pedazo de cielo cristalizado', la obra más icónica y reconocible de Artium, que estos días se pone guapa para recuperar todo su esplendor.

Una labor exhaustiva y metódica que, por su complejidad y fragilidad, requieren de un mimo especial. El que le dedica la plantilla de la empresa vitoriana Artyco que, desde el 18 de noviembre, elimina el polvo depositado durante 18 años en estas miles de 'lágrimas'.

Aspirador, trapo y agua

Limpieza cristales cielo bola Artium

Así, tras utilizar un aspirador telescópico para acabar con las partículas depositadas en el interior de la estructura metálica, toca limpiar a mano, de arriba abajo, cada una de las piezas. Un trapo y agua mineralizada son los utensilios de trabajo.

Y un pequeño gancho para, en el caso de que sea necesario descolgar alguna de las bombillas, colocarlo en su lugar y saber dónde reubicar el cristal exactamente. Un detalle imprescindible para que la obra mantenga el equilibrio, movimiento y sonoridad adecuados.

Las fases

  • Extracción de la suciedad depositada sorbe la parte interior de la estructura metálica (rejilla de trama cuadrada, los 31 gajos o costillas metálicas y el aro superior con 13 radios tubulares), a través de una aspiración controlada del polvo y los restos no adheridos mediante un sistema tubular de pértiga telescópica rematado en su extremo final de un cepillo de cerdas finas.
  • Evaluación y desmontaje de las piezas de vidrio que requieran sustitución de su gancho de sujeción a la malla metálica. Dichos ganchos serán sustituidos por otros que mantengan la misma morfología, pues de ello depende el correcto equilibrio y verticalidad de la lágrima de cristal y, por tanto, su adecuada visualización, movimiento y sonoridad en funcionamiento.
  • Intervención en las 12.200 lágrimas de vidrio que componen la escultura, de acuerdo con los criterios de actuación y metodología establecidos dentro del proceso diseñado para los trabajos de conservación y restauración de la obra.

Acceso principal limitado


Dos andamios y una gran plataforma fija permiten el desplazamiento por esta pieza de grandes dimensiones. Nada menos que 10 metros de diámetro y 4 de altura. ¿El ritmo de limpieza? Unos 120 cristales, más o menos, por día. Y es que la estructura semicircular limita su manipulación, ya que en la parte inferior se concentran más piezas, lo que complica el desmontaje.

Limpieza cristales cielo bola Artium

Por ello, los cálculos son que hasta enero 'Un pedazo de cielo cristalizado' no recuperará toda su luminosidad. Hasta entonces, la entrada principal del museo seguirá limitada, mientras se prioriza el acceso por la plaza interna.

Tiempo también durante el que el tintineo cristalino resonará más fuerte en Artium, creando, junto con la limpieza, un efecto un tanto hipnotizante en quienes lo visiten.

Y así lo ha podido comprobar el propio autor de la obra, Javier Pérez, que este miércoles ha asistido 'in situ' a este mantenimiento intensivo. El artista vizcaíno creó esta escultura en 2001 para el Pabellón de España en la Bienal de Venecia.

Ninguna rotura en 22 años

Con ella, como ha detallado, quiso reflexionar sobre la propia ciudad de Venecia y la condición humana. "Quería reflejar su fragilidad. Es una ciudad construida en el aire que se refleja en el agua, como una segunda ciudad sumergida. Me imaginaba sus cúpulas reflejadas en el agua, con un continuo movimiento seductor", ha explicado. Una presencia acuática continua "que pone en peligro la ciudad".

Limpieza cristales cielo bola Artium

En 2002, Artium la adquirió y la convirtió en su principal seña de identidad. Su instalación requirió de una adaptación previa al entorno. Como dato curioso, Javier Pérez creó 15.000 cristales para su escultura para, en el supuesto de que alguno se rompiera o estropeara, poder reemplazarlo. Hasta ahora, no ha sido necesario. Tampoco en 2006, cuando vivió su primera sesión de limpieza.

En el museo vitoriano, Pérez ha reconocido que 'Un pedazo de cielo cristalizado' "funciona perfectamente en un espacio de tránsito del público". En su momento, era clave que la escultura estuviera "suspendida a una altura determinada, para hacer sentir de cierta forma a la gente". Una cierta sensación de "amenaza con el choque de las piezas. El cielo protector se convierte, al mismo tiempo, en amenazador".

Actividades para el público

El artista ha agradecido la labor de restauración que se está llevando a cabo, gracias sobre todo a un convenio de colaboración entre Diputación de Álava y Fundación Iberdrola, que ha financiado los 40.000 euros de los trabajos.

Limpieza cristales cielo bola Artium

"Es importante que la obra luzca como el primer día, para tener el aspecto seductor con el que se creó y que forma parte de ella", ha valorado.

Así lo expondrá también esta tarde, en un encuentro con el público que tendrá lugar a las 18:30 horas. También asistirá Enrique Martínez Goikoetxea, conservador de la colección de Artium.

Además, el 2 de diciembre habrá una presentación exhaustiva del proceso de restauración, de la mano de la empresa Artyco. Y el 18 de diciembre, Artium ha organizado una conversación entre Cristina Aransay, jefa del Servicio de Restauración de Diputación, y Enrique Martínez Goikoetxea.

Las tres actividades son gratuitas y para asistir, es necesario apuntarse previamente en el teléfono 945 20 90 20 o en artium.eus.