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21 de abril
Así vivió Vitoria-Gasteiz el mítico año 1992
Este año se cumplen 30 años de los Juegos Olímpicos de Barcelona, la Exposición Universal de Sevilla y la Capitalidad Europea de la Cultura en Madrid
“El entrenamiento ha durado casi diez años, en la puesta a punto se han invertido cifras fabulosas. La expectación es tanta, que más que un año parece un lema publicitario”. Así iniciaba Informe Semanal el reportaje dedicado a los tres eventos que marcaron el año 1992. Los Juegos Olímpicos de Barcelona, la Exposición Universal de Sevilla y la Capitalidad Europea de la Cultura en Madrid.
La llama olímpica también pasó por Vitoria-Gasteiz antes de llegar a Barcelona. Revista Celedón 1992.
A la sombra de aquellos acontecimientos, el verano de 1992 se presentaba en Vitoria-Gasteiz de la misma manera que otros anteriores. Las tradicionales hogueras de San Juan de Arriaga y Judimendi dieron el pistoletazo de salida al verano. Un año en el que las lluvias caídas a lo largo del día estuvieron a punto de suspenderlas.
Como es habitual, las autoridades locales y provinciales asistieron al acto del parque de Arriaga. Fue el Diputado General, Alberto Ansola, el encargado de prender la hoguera.
El mal tiempo se prolongó hasta bien entrado el verano. Por ello el cine resultaba una buena opción. Los Mikeldi, inaugurados en 1989, y los Guridi, en diciembre de 1991, entre otros, ofrecían en cartelera títulos como 'Poli de guardería' con Arnold Schwarzenegger. También 'Makinavaja-el último choriso', con Andrés Pajares y Carmen Conesa.
Cartel de fiestas de 1992.
La reforma del Teatro Principal, las obras de ampliación del Gobierno Vasco o la construcción de los nuevos juzgados eran algunas de las noticias que marcaron los meses estivales. El auge de las viviendas unifamiliares también despertó en aquel momento el recelo de algunos municipios cercanos a la capital alavesa. Municipios como Arratzua-Ubarrundia temían convertirse en localidades dormitorio.
El mes de julio avanzaba con la celebración del Festival de Jazz, que costaba 1.700 pesetas día (algo más de 10 euros). La XVI. edición contó con la presencia de Chick Corea o Wynton Marsalis, entre otros, y gran afluencia de público en el polideportivo de Mendizorroza.
La Blanca 1992 en Vitoria-Gasteiz
El día 25, mientras en Barcelona un gigantesco mosaico hecho con personas saludaba con un 'Hola' a los miles de asistentes que acudieron a la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos, en Vitoria-Gasteiz se celebraba, como siempre, el Día del Blusa. La venta de ajos, el paseíllo y la carrera de burros, que por segundo año consecutivo ganó la cuadrilla Okerrak, marcaron la jornada.
Aspecto de la carrera de burros en la Virgen Blanca de 1992.
Con la llegada de agosto las tradicionales retenciones de la operación salida regresaban a las carreteras. La antigua circunvalación aun hacía su labor de desviar el tráfico de la N-1. La actual autovía aún no estaba finalizada. Esto provocó que los atascos se dejasen ver casi en la propia ciudad.
El día 4, con el txupinazo y la plaza de la Virgen Blanca abarrotada de gente, comienzaron las fiestas. El concierto de la plaza de los Fueros de aquella noche fue a cargo de 'Complices'. Este grupo congregó en la plaza a multitud de personas.
Tenesse u Oskorri fueron otros grupos que también tocaron sobre el escenario de la plaza. En el Machete, dentro de las actuaciones de bertsolaris de aquellas fiestas participaron entre otros una muy joven Maialen Lujanbio, con poco más de 16 años. También estuvieron Ion Maia y el ya consagrado Xabier Amuriza entre otros.
Fotografía del paseíllo en 1992.
Entre las canciones que más sonaron aquellas fiestas, 'El Tractor Amarillo' fue la más escuchada sin lugar a dudas. Un ejemplo de agropop que periódicamente nos atormenta los veranos. Aunque otras como 'Cuéntame un cuento', de Celtas Cortos; 'Black or White', de Michael Jackson; o 'Bonito es', de los Sencillos, estuvieron durante semanas en las listas de éxitos de las radios.
Pero al finalizar agosto, se empezaba a atisbar de forma más evidente los síntomas de una recesión económica. Aún sin superar la crisis industrial de los años 80 y con una cifra de paro del 19% en Vitoria-Gasteiz, los anuncios por parte de las administraciones de austeridad presupuestaria hacían presagiar un duro 1993.
Muchas medallas en Barcelona
Aunque más duro fue el otoño del 1992 para la compañía aseguradora de la tienda local de electrodomésticos que prometió devolver el importe de las compras realizadas entre el 3 de junio y 24 de julio si España superaba las 10 medallas.
Contra todo pronóstico el medallero español se hizo con 22 metales, muy lejos de sus resultados en Juegos Olímpicos anteriores que no superaban en el mejor de los casos la media docena. La empresa aseguradora tuvo que hacer frente a un desembolso de más de 100 millones de pesetas (600.000 euros) a los que tuvo que sumar promociones similares en otras localidades que ascendieron la cifra a más de 300 millones.
