Bacalao Giraldo ya no está en manos alavesas
La portuguesa Brasmar adquiere la empresa familiar alavesa, que estaba en concurso de acreedores
Fin agridulce para los problemas que en los últimos tiempos acompañaban a Bacalao Giraldo. Esta empresa familiar ya no está en manos alavesas, y pasa a ser propiedad de Brasmar.
La firma portuguesa ha adquirido Bacalao Giraldo, lo que pone acaba también con el proceso concursal en el que estaba inmersa desde el pasado febrero. La jueza ha aceptado la propuesta lusa, por un monto total de 18,5 millones de euros.
Mantiene puestos de trabajo
De ahí una parte, en torno a los 4 millones, se destina a la compra como tal de la empresa. Algo más supondrá la inversión que permitirá que siga en funcionamiento pese a las pérdidas acumuladas. Y otra parte, la más importante, servirá para mantener todos los puestos de trabajo.
Así lo confirman desde el comité de empresa, que preside LAB, a Gasteiz Hoy. "Lo que más nos preocupaba es que nos mantuvieran las condiciones laborales y subrogaran los puestos, y eso se va a hacer", constatan.
Una buena noticia para las cerca de 120 personas que conforman la plantilla. Y que han seguido con incertidumbre un proceso en el que las primeras alarmas saltaron con el nuevo año. En enero se supo que las cuentas de Bacalao Giraldo no salían.
¿Cómo empezaron los problemas?
Pero el problema ya venía de atrás. Fue hace un año, en julio de 2024, cuando entró en un preconcurso voluntario de acreedores en un intento de salvar la situación. La cual comenzó con la nueva planta estrenada, también en mayo de 2024, en Legutio.
La empresa que surte a cadenas como Eroski, El Corte Inglés, Mercadona o Carrefour había invertido 10 millones de euros en dichas instalaciones. Si bien 4 de ellos fueron eran de capital público en forma de ayudas recibidas.
El objetivo era consolidar su apuesta por los platos preparados. Un sueño que no llegó a cumplirse, ya que, mientras Bacalao Giraldo estaba inmersa en las obras de la fábrica, los pedidos y clientes se redujeron.
La pandemia paralizó los trabajos y después, la inflación trajo un sobrecoste en los materiales de la construcción. Cuando tocaba devolver los créditos bancarios. Bacalao Giraldo tuvo que pedir una ampliación de capital para cubrir dicha inversión.
Con la planta ya lista, llegaron más malas noticias. Las cuotas de pescado en el Atlántico Norte se redujeron, lo que afectó a las capturas de bacalao, y un volcán en Islandia entró en erupción.
Casi medio siglo de historia
Las pérdidas se acumulaban y las conversaciones con algunas firmas del sector, como Anguilas Aguinaga, para reflotar la situación, no llegaban a buen puerto. Ante este panorama, Bacalao Giraldo entró en febrero en concurso de acreedores. No había más margen ni alternativa para abordar las deudas que les ahogaban.
Desde entonces, la portuguesa Brasmar ya había mostrado interés. Y los rumores crecían por doquier. Finalmente, las conversaciones han dado frutos. La familia Giraldo deja la empresa familiar, que tiene sus orígenes en 1976, en un ultramarinos de la calle Basoa. Un punto y final a casi medio siglo de historia.
Aún no hay fecha fija para que la adquisición se haga efectiva. Desde LAB apuntan a que podría realizarse "a finales de julio o en agosto". Lo que sí tienen pendiente, una vez que entre la nueva propiedad, es sentarse para abordar diversas cuestiones laborales.
Entre ellas, el nuevo convenio. Porque el actual expiró en 2024. "La antigua propiedad tenía la obligación de haberlo desarrollado para los próximos años, fue un compromiso que no llegó a efectuarse", indican. Confían en que puedan negociar con los nuevos dueños cuestiones como las "categorías, la renovación del IPC en los sueldos o la prevención en riesgos psicosociales, porque hay varias bajas".
Brasmar
Brasmar es una empresa portuguesa especializada en el procesado, distribución y venta de pescado y marisco congelado. Tiene sede en Trofa, y su capital lo forman Vigent Group (un hólding industrial luso de la familia Silva) y el fondo de capital riesgo español MCH.
Este último es el accionista mayoritario, con un 51%, pero desde 2023 no ha ocultado su intención de salirse de la compañía.
La compra alavesa es la tercera de Brasmar en España. Anteriormente, adquirió Foncasal en Logroño y La Balinesa, en León.
noticia anterior

La Escuela Infantil Sansomendi estrenará nueva cubierta en el curso 2025-2026
La cubierta será renovada con una inversión de 101.175 euros y estará lista para el próximo curso
noticia siguiente

Detenidos tras intentar robar con una bolsa "preparada para inhibir los sistemas de alarma"
Los detenidos son un hombre y una mujer de 43 años