¡CAMPEONES!

30 junio, 2020

Una canasta de Luca Vildoza a falta de 3 segundos da la cuarta liga al Baskonia (67-69)

Y la historia se repitió. Baskonia se alzó como campeón de liga un martes de junio contra el Barça y con Dusko Ivanovic en el banquillo. Las circunstancias no son ni parecidas por las consecuencias deportivas de la pandemia. Pero al menos ahora Vitoria-Gasteiz y los aficionados baskonistas tienen un motivo para sonreír. Baskonia recupera, diez años después, la sensación de ser campeón.

Lo hizo con una canasta de Luca Vildoza a falta de 3 segundos para el final. Tras una batalla física sin cuartel, fue el cerebro de Dusko Ivanovic lo que decidió el choque en una jugada de pizarra. El argentino fue también designado MVP de la final con 17 puntos, 4 rebotes, 2 asistencias y 2 robos.

Sin cuartel

Los nervios estuvieron presentes desde el primer minuto, con un inicio errático por parte de ambos conjuntos. Pero se cumplieron todas las previsiones: el nivel de intensidad y defensivo no tuvo cuartel. Comenzó más activo el Barcelona, robando balones y poniéndose por delante gracias a 6 puntos fáciles de Mirotic.

Tras el despiste inicial y los primeros gritos de Dusko, Baskonia reaccionó. Robaron y corrieron para ponerse arriba en el marcado, con Shavon Shields siendo el más agresivo a canasta. Tras un final de cuarto igualado y con mucha personal, los vitorianos mandaban en el marcador por la mínima (16-17).

También comenzó más fuerte el Barcelona el segundo cuarto. Un parcial de 7-0 hizo que Ivanovic detuviera el partido. Baskonia había vuelto a perder el rumbo en ataque, con un Toko desaparecido hasta entonces. Aunque el parcial continuó tras el tiempo muerto gracias a Thomas Heurtel, otro viejo conocido del Buesa Arena.

Baskonia no se rinde

Fue el punto de inflexión en el cuarto, porque desde entonces los culés mandaron en marcador y sensaciones. Pero Baskonia no se rindió, continuó con su juego basado en la defensa y recortó distancias gracias a la energía de Ilimane Diop y a las esporádicas apariciones de Toko Shengelia. Los azulgrana iban a necesitar más de su capitán en la segunda mitad.

Kyle Kuric se encargó de poner la puntilla para confirmar el liderato del Barça justo antes del descanso. Primero con dos triples y luego con una canasta en los instantes finales para poner el 39 a 33.

Tiempo del MVP

El tercer cuarto comenzó parecido al primero: con muchos errores ofensivos y varios aciertos defensivos. Hasta que Luca Vildoza revolucionó el encuentro con dos triples consecutivos. El argentino ya había tenido algún destello en la primera mitad, pero era ahora cuando más peso tenía en el encuentro. Esta vez fue el Barça el que entró en un pequeño colapso del que se aprovechó el Baskonia para ponerse 4 arriba.

Pero la batalla seguía siendo sin cuartel: los culés siguieron en la lucha a base de Thomas Heurtel y llegaron al último cuarto empatados a 51. El partido estaba donde el Baskonia quería: con el Barça sin desplegar todo su potencial ofensivo y perdiendo más balones de los debidos (15 pérdidas).

El último cuarto comenzó con un jugador hasta ahora desaparecido: Matt Janning apareció con dos triples, pero también contestó Cory Higgins para mantener la igualdad.

Expulsión de Mirotic

Aunque el verdadero gran momento para el Baskonia fue la expulsión de Nikola Mirotic a falta de 5 minutos. El MVP de la ACB sumó su quinta falta y dejó al Barça sin su gran referente, a pesar de que hoy no estaba siendo tan determinante.

Ni con esas cogió impulso el Baskonia, debido al desgaste mayúsculo de los partidos acumulados. Empezaban a flaquear las fuerzas en los conjuntos, y la igualdad era máxima a falta de 3 minutos (64-64).

Un triple de Polonara a falta de 2 minutos fue decisivo, porque de ahí a los últimos 10 segundos la única canasta fue un tiro libre de Oriola. El catalán anotó otros dos en los últimos segundos para empatar el partido. La liga se iba a jugar en 10 segundos.

Y salió cara para el Baskonia. Una jugada de pizarra de Dusko Ivanovic dejó a Vildoza con toda la pintura libre para anotar la bandeja que daría la cuarta liga. Quién le iba a decir al argentino que en febrero, cuando pasó por el quirófano, iba a entrar por la puerta grande a la historia baskonista. Y quién le iba a decir al Baskonia y a sus seguidores que después de uno de sus peores inicios la temporada iba a acabar así. Con la cuarta liga en las vitrinas del Buesa Arena. Ahora toca celebrarlo.