El carácter Baskonia mete a los azulgrana en el top 8 de la Euroliga

29 marzo, 2018

El Buesa vivió una de sus mejores noches en el triunfo definitivo para entrar en playoffs (83-72)

Parecía casi imposible hace cinco meses. El top 8 era casi una quimera para un Baskonia desolado tras la marcha de Prigioni. Pero el ascenso meteórico del equipo bajo las órdenes de Pedro Martínez quedó reflejado en 40 minutos de puro carácter Baskonia ante el Maccabi, con un resultado final de 83 a 72. El triunfo azulgrana por fin significó la clasificación definitiva para playoffs, tras remar a contracorriente durante toda la temporada regular.

Además, la derrota del Khimki frente a Fenerbahce deja al Baskonia séptimo de cara a la última jornada, e incluso podría ponerse sexto si el viernes pierde Zalgiris.

En el duelo más decisivo de la temporada hasta el momento también se vio la madurez que ha alcanzado el grupo bajo la tutela del técnico catalán. La sangre argentina apareció cuando más quemaba el balón por medio de Garino y Vildoza, dos jugadores que apenas sumaban a principios de curso. Ambos revolucionaron el choque en el último cuarto para ser los hombres más decisivos en el triunfo, junto con los 14 puntos de Voigtmann.

La tensión se mascó desde el primer minuto con ambos equipos algo precipitados y Baskonia marcando territorio en defensa. La pareja interior Diop-Voigtmann superó notablemente a la israelí tanto en ataque como en defensa. Aun así, el Maccabi salió con sus piezas más dañinas y llevó ligeramente la ventaja durante casi todo el primer cuarto.

Con la entrada de la segunda unidad Baskonia tomó el control del partido. La entrada de Poirier desde el banquillo dejó al francés con toda la ventaja frente a los suplentes visitantes. Con seis puntos consiguió la ventaja en el marcador y Beaubois la apuntaló con un triple en el último instante. La primera batalla fue de color azulgrana con 22-18 en el electrónico.

  • El capitán enciende la mecha

Baskonia había encontrado la velocidad adecuada, y no podía pisar el freno. Nada más reanudarse el segundo cuarto Tornike Shengelia cogió galones y sacó 7 puntos de diferencia que obligó a Spahija a parar el partido. Pedro Martínez siguió intercambiando piezas para dar con la tecla que le permitiera romper el partido.

Lo consiguió con Vildoza en el puesto de base, que conectó de forma excepcional con Voigtmann en lo que ya se está convirtiendo en un clásico del Buesa. Garino en las alas remató con la intensidad necesaria para conseguir los 10 puntos de ventaja en el ecuador del cuarto 34-24.

Cuando mejor parecía ir el partido, tres triples de Jackson, Thomas y Kane igualaron el choque en un suspiro (34-32).  Los azulgrana encararon el descanso con una ventaja menor de la que podrían haber obtenido por unos breves minutos de reacción visitante. Algunas decisiones arbitrales, fuertemente protestadas por el Buesa, tampoco ayudaron. La segunda mitad comenzaba con 38-34 con todo por decidir.

Garino y Vildoza sacarón la sangre argentina que tanto ha definido al Baskonia en este siglo

Otro comienzo de cuarto, otro empujón baskonista. Los locales salieron del descanso enchufados y el ex entrenador azulgrana tuvo que parar el partido de nuevo al recibir un parcial de 5-0 al inicio. El tercer periodo suele ser el más beneficioso para los azulgrana, que pusieron la directa, pero esta vez tampoco consiguieron romper el encuentro.

Maccabi fue inteligente y no se dejó llevar por la fuerza del Buesa. Ralentizaron el juego y siguieron al acecho hasta encontrar su momento. Y lo hicieron a falta de un minuto para el último cuarto. Tras una serie de canastas fáciles en segundas oportunidades Norris Cole empató el partido a 53 con un triple. Un 2+1 de Garino dio una mínima ventaja al Baskonia justo antes del asalto final (56-53).

  • Garino levanta al Buesa

El argentino empezó el último cuarto igual que lo acabó. Dos mates consecutivos de Garino encendieron al Buesa como hace tiempo que no se veía para poner el 60-53 en el marcador.

Vildoza se contagió de la sangre de su compatriota cuando le tocó relevar a Granger. El argentino salió y demostró su madurez alcanzada en tiempo récord con inteligentes ataques que mantuvieron la ventaja local. Voigtmann se nutrió de sus pases para engordar su casillero.

El propio Vildoza certificó la clasificación del Baskonia en el Top 8 con un triple a falta de 1:30, aunque la machada aún no está completada. Queda ganar al Anadolu Efes en la última jornada y conseguir algo más que un octavo puesto. Después de todo, incluso sabría a poco. Quién lo diría hace cinco meses.