Comerciantes de la Plaza de Abastos se hartan de los retrasos y los incumplimientos

La Plaza de Abastos va camino de convertirse en la obra del Escorial de Vitoria-Gasteiz. La reforma de este espacio sigue avanzando muy lentamente y aún no hay fechas para la inauguración de los gastrobares y la terraza. Y esto está acabando con la paciencia de numerosos comerciantes.

En realidad la Plaza de Abastos cuenta con dos clases de comerciantes: por un lado los comerciantes de toda la vida, los que estaban en la anterior plaza y ahora disfrutan de la reforma. Comerciantes que tienen sus puestos arrendados a la Plaza de Abastos directamente, y agrupados en torno a 'La Plaza'.

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• Subarriendo

Sin embargo, todos los nuevos puestos, ubicados alrededor de la plaza y en el último pasillo, están subarrendados. En este caso es Baika la propietaria directa del espacio y a quien deben reclamar los propios comerciantes. Tanto los gastrobares como los nuevos puestos fueron alquilados a esta concesionaria a cambio de la reforma. Y Baika posteriormente ha arrendado estos espacios. El problema es que los comerciantes denuncian la falta de información y, en algunos casos, el ocultamiento de algunos datos como los gastos de comunidad, la fecha de apertura o el contenido y la distribución de los nuevos espacios.

La apertura de los gastrobares acumula más de 8 meses de retrasos, según las promesas realizadas a los comerciantes. Las obras parecen estar en sus últimos coletazos. La última fecha de apertura era el 7 de julio, pero no se ha cumplido. Ahora la lógica habla de hacerlo para el Día del Blusa, pero los comerciantes ya no quieren oír hablar de más previsiones.

• Muro con los gastrobares

En el último pasillo, el ubicado junto a los gastrobares, las pérdidas son diarias. Allí se ubican una frutería, una tienda de golosinas, otra de bacalao, una pollería y una de ibéricos. Todos ellos han llegado de la mano de Baika, atraídos por la promesa de su cercanía con los gastrobares. Pero por ahora están en un pasillo más estrecho y oscuro que otros, y afectado por el ruido de las obras. Se trata de un espacio aislado, que estaba llamado a ser sin embargo el más atractivo de la plaza.

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Los comerciantes aseguran que Baika les prometió un espacio abierto, una conexión visual directa con las mesas y barras. Sin embargo esto no será así: un muro de cajas de cerveza de casi dos metros separará ambas estancias. De esta forma desaparecen las posibles sinergias y poco o nada tendrá que ver esa zona con los mercados madrileños de San Antón o San Miguel.

• Terraza

De momento sí parece que a finales de julio estará lista la terraza superior, a la que se accederá a través de las escaleras y del ascensor-mirador exterior.

Según rezan algunos carteles, a finales de mes el mercado de productores y otros dos gastrobares abrirán sus puertas en la parte superior. Será el culmen a la obra de la terraza. Una reforma que ha durado más de lo previsto inicialmente.

• Reforma integral

La reforma de la Plaza de Abastos arrancó a comienzos de la pasada legislatura. Una reforma que ha transformado por completo el antiguo edificio, con una inversión de 10 millones de euros según Baika. El Ayuntamiento ha aportado 200.000 euros.

Amplias cristaleras han ensanchado la superficie de ventas. En la planta baja se ubican actualmente los negocios supervivientes, apenas una tercera parte de los que en su día ocupaban las plantas inferior y superior. Todos ellos se han modernizado, con espacios más amplios. 

La Plaza de Abastos se ha convertido, eso sí, en un espacio en el que dos terceras partes de su superficie pertenecen a BM y El Corte Inglés. Ambas cadenas tienen accesos independientes, con lo que los clientes de Deportes o del Supermercado no tienen por qué pasar por el mercado. Desde La Plaza se ha vendido desde el principio estas llegadas como un polo de atracción a la plaza. Sin embargo son pocos los que, tras visitar la tienda de deportes, atraviesan la puerta de la Plaza.