Comienza el vallado completo del Parking San Martín

7 enero, 2013

El solar deja ver ya un enorme agujero

sanmartinDesde esta mañana está prohibido aparcar en el Parking de San Martín. El medio centenar de coches que a las 10:30 de hoy aún se encontraban en el solar serán retirados entre hoy y mañana por sus propietarios o por la policía local. Mientras tanto, los operarios se preparan para vallar la manzana, el primer paso para arrancar con las obras de construcción de las nuevas oficinas municipales de San Martín.

Tras un retraso de casi siete meses motivado por la falta de algunos papeles necesarios para su inicio, las obras han arrancado finalmente. Lepazar XXI espera tener finalizado el edificio en 2015, en el que trabajarán más de 600 funcionarios. Además, habrá un parking subterráneo y otro en superficie.

El comienzo de las obras supone, por tanto, la desaparición total del actual aparcamiento en superficie. Para los vecinos afectados se ha establecido una oferta para el parking de la catedral de de 45 euros al mes durante el tiempo que dure la obra. Mientras, continúan los trabajos en el parking subterráneo iniciados el pasado febrero. La mayor parte de las plazas de las dos primeras fases están ya reservadas. A través de las vallas se puede observar ya el enorme agujero que se ha excavado ya en la zona.

sanmartinagujeroUna vez edificado el moderno ayuntamiento, está previsto que San Martín se convierta en un nuevo núcleo de centralidad urbana. El edificio, que albergará a más de 600 funcionarios municipales, dispondrá de planta baja más cuatro alturas y contará con dos parkings (uno subterráneo y otro en superficie). Está inspirado en la almendra medieval y se ha concebido con argumentos de eficiencia energética, de manera que sea sostenible y eficaz en sí mismo.

En su proyecto se han tenido especialmente en cuenta valores como el compromiso con el contexto urbano, la contemporaneidad de su diseño, la investigación tipológica y funcional, la calidad espacial, la relación entre medios y fines, la representatividad necesaria y la importancia de los criterios de eficiencia y flexibilidad, para que todos ellos sean capaces de generar una arquitectura pública de calidad.