ELA sube y se aprovecha del descenso de UGT en el comité de Mercedes Vitoria

ELA ha igualado en representantes sindicales a UGT en las elecciones sindicales que se han celebrado en Mercedes. El descenso de UGT (pierde 2) y el ascenso de ELA supone un aval para el actual comité de empresa, gestionado desde 2016 por ELA tras la destitución de UGT. Los resultados de UGT son los peores desde los años 80.

Igor Guevara, en el centro (archivo)

UGT y ELA tendrán 7 delegados, por 4 de CCOO y LAB y 3 de Ekintza, PIM y ESK. En las anteriores elecciones sindicales, UGT ganó con 9 delegados, le siguieron ELA y LAB, con 5 cada uno, CCOO se quedó con 4 y Ekintza y PIM consiguieron 2 cada uno. En 2018 ha habido más delegados por el aumento en la plantilla.

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ELA, LAB y ESK mantienen 14 delegados, mientras que UGT, PIM y Ekintza tienen 13. La posición de CCOO, que en 2016 propició el cambio de presidencia, será clave para saber quién preside el comité de empresa.

ELA ve estos resultados "muy positivos, sobre todo teniendo en cuenta la alta participación, que dice mucho de la involucración de la plantilla en este proceso". ELA ha sido la más votada en el taller y ha vuelto a tener representación en oficinas". El sindicato ha asegurado que "apostará por la negociación colectiva real con la clara premisa del respeto a las mayorías".

UGT ha sido tradicionalmente el sindicato mayoritario en Mercedes Vitoria, aunque en 2016 el resto de los sindicatos desbancaron al presidente del Comité de Empresa al entender que defendía más los intereses de la empresa que los de los trabajadores. La posición de CCOO en este punto fue clave para el cambio de presidencia.

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Igor Guevara fue elegido entonces presidente del comité. ELA, LAB y ESK han sido muy activos en las denuncias contra la precariedad que arrastra Mercedes Vitoria. De hecho los tribunales han certificado el fraude de ley en contratos temporales no fijos. ELA denunció también las jornadas de hasta 12 horas.

UGT, por su parte, alcanzó en 2016 un acuerdo de convenio que el resto de los sindicatos rechazaron, aunque posteriormente se unió CCOO tras un referéndum que el resto de sindicatos pidió no secundar y en ese momento se hizo general.  ELA, LAB y ESK acusaron a UGT y también a CCOO de "traficar con los trabajadores eventuales".