El contenedor gris cerrará algunos días de la semana para aumentar el reciclaje y la orgánica
El cierre del contenedor gris se aplicará durante la nueva contrata, que entrará en servicio a finales de 2025
El contenedor gris de restos cerrará algunos días de la semana con la nueva contrata. Así lo ha confirmado Pascual Borja, concejal de limpieza, a preguntas de Elkarrekin. Eso sí, no será una medida que se implante de inmediato, ya que la nueva contrata arrancará en un año y para iniciar el cierre habrá que cambiar los contenedores actuales.
Entre las novedades del nuevo contrato estará el cierre del contenido gris, de entrada como experiencia piloto en algunas zonas de Vitoria-Gasteiz. "Será un proceso parecido a la orgánica, comenzaremos con un proyecto piloto, cerrando algunos días en zonas concretas para poco a poco ir implantándolo en el resto de la ciudad".
Borja ha aclarado que esto irá de la mano con una campaña de concienciación ciudadana. "Nuestra intención es implantarlo en toda la ciudad, pero habrá que hacerlo en distintas fases". No será necesaria una tarjeta para abrir el contenedor como ocurre ahora con la orgánica. Simplemente se cerrará algunos días y nadie podrá usarlo esas jornadas.
El cierre del contenedor gris busca aumentar la separación de los residuos y fomentar el uso de los contenedores de orgánica y de reciclaje. Actualmente se separa el 38% de lo que tiramos a los contenedores, frente al 50% necesario. De hecho, Vitoria-Gasteiz también suspende como Green Capital por ahora en el reciclaje: solo recicla el 36% de los residuos frente al 55% al que obligará Europa en unos años en las ciudades.
En realidad, el contenedor gris debería ser el menos utilizado de todos, si se separa correctamente la orgánica, el vidrio, el papel y los envases. Y ese es el objetivo municipal con su cierre algunos días. Según los datos municipales, el 54% de lo que se deposita en el contenedor gris es basura orgánica. Es decir, debería ir al marrón. Otro 11% son envases cuyo lugar es el amarillo, a otro 7%, por ser papel y cartón, le correspondería el azul y un 4% más tendría que tirarse en los iglús verdes de vidrio.
Eso sí, en los inicios es previsible que las bolsas de basura se acumulen en el exterior del contenedor gris cuando este esté cerrado. Por eso Pascual Borja ha explicado que habrá que aumentar la vigilancia y el paso de los operarios de limpieza por estos contenedores. "Empezaremos con un programa piloto y sabemos que esto supondrá hacer acciones de repaso con los camiones de recogida".
Nuevo contrato de limpieza
El cierre del contenedor gris se aplicará a lo largo del próximo contrato de limpieza. Un contrato que arrancará en un año. Y para ello ha iniciado ya los contactos con las cinco principales empresas para conocer los costes actuales, sobre los que luego lanzaría el contrato.
Así, ha pedido información a Prezero, Enviser, FCC, Valoriza y GBI Service, tal y como le ha preguntado EH Bildu. "Seguimos apostando por una gestión indirecta", ha asegurado Pascual Borja. Las claves del nuevo contrato serán:
- Seguir con la concienciación de la limpieza.
- Adquirir nueva flota de maquinaria y camiones, ya que los actuales han alcanzado su vida útil.
- Incrementar los baldeos y fregados de superficies para eliminar el aspecto sucio de aceras.
- Seguir con limpieza de grafitis.
- Reforzar la limpieza de los barrios.
- Incrementar la recogida selectiva: ahora está en el 38% y hay que llegar al 50%.
- Aumentar el reciclado: ahora está en el 36% y hay que llegar al 55%.
- Promover y facilitar la separación de residuos puerta a puerta.
- Mejorar la recogida en Ensanche y Casco Viejo.
El contrato actual termina en noviembre de 2025 y se espera adjudicar el nuevo en esas fechas.
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