Couchsurfing, una alternativa para enseñar Vitoria a turistas y viajar por el mundo

27 marzo, 2018

Tres usuarios gasteiztarras de Couchsurfing nos cuentan sus experiencias en esta red de alojamiento altruista

Alrededor de 3.000 usuarios alaveses están registrados en la plataforma online Couchsurfing, un sistema internacional de intercambio de alojamientos que fue fundado en 2004 y que facilita el intercambio cultural entre varias personas, los que alojan y los que viajan.

La idea es que el Hoster (la persona que aloja al viajero) preste su "sofá" al Surfer (la persona que viaja) para que pueda dormir. No hay compensación económica de por medio, el espíritu de Couchsurfing es ayudar al viajero, enseñarle la realidad cultural del lugar que visita y facilitarle un espacio en el que pasar la noche.

¿Conocías Couchsurfing?, ¿Has tenido alguna experiencia? Gasteiz Hoy ha contactado con tres couchsurfers de Vitoria-Gasteiz para que nos cuenten sus vivencias en esta plataforma.

Nos sentimos embajadores de Vitoria-Gasteiz cuando un viajero nos visita

couchsurging vitoria

Mikel Rodríguez Domínguez y Eva Pérez Aldonza acogen a diferentes viajeros en su casa de Vitoria-Gasteiz. Su última experiencia fue en febrero con un viajero alemán.

Mikel supo de este proyecto en un viaje a Riga y a otras localidades del Este. Un grupo de viajeros franceses y, posteriormente, unos australianos, le hablaron de Couchsurfing.

Uno de esos viajeros fue su primer huésped en Vitoria-Gasteiz en 2010: desde entonces las vivencias han sido múltiples. Más como hosters que como surfers. Es decir, la pareja aloja a viajeros en su hogar gasteiztarra.

Han recibido a gentes de Australia, Estados Unidos, Alemania, Rusia, Italia y Argentina entre otros. Un total de 16 viajeros de nueve países diferentes han visitado la residencia de Eva y Mikel: "Nos sentimos embajadores de Vitoria-Gasteiz cuando algún viajero nos visita, les mostramos diferentes puntos de interés de la zona, tomamos cervezas o vamos de conciertos".

En general todas las experiencias han sido más que satisfactorias y guardan muy buenos recuerdos. "Salvo pequeñas anécdotas, no hemos tenido ningún problema con nadie"

En los últimos tiempos hay mucho viajero "Erasmus" que se aprovecha de la plataforma para estar un tiempo alojado de manera gratuita mientras realiza una búsqueda de otro alojamiento para su estancia.  "Al final la idea no es esa, la idea es acoger a gente viajera que va de un lugar a otro y que están de paso por Vitoria-Gasteiz".

Alojar a alguien es una gozada: conoces gente, otros ritmos de vida y diferentes culturas

"También ha habido gente que ha venido a buscar trabajo y que ha alargado al máximo su estancia", reconocen.  La plataforma permite elegir el máximo de días que un viajero puede estar en un alojamiento y la pareja opta por la opción de "3 días está bien".

No es necesario alojar a viajeros para estar registrado y conocer gente en Couchsurfing. Pero la pareja lo tiene claro: "Alojar a alguien es una gozada, conoces gente, otros ritmos de vida y diferentes culturas".

Los próximos destinos de Eva y Mikel podrían ser Irán, un país que cuenta con un buen número de surfers, o Albania. Ahora la pareja ha aumentado la familia y aunque no tuvieron suerte al buscar alojamiento para los tres en Dubai, sí pudieron visitar recientemente Rusia, donde tuvieron experiencias dispares.

"Con un niño hemos elevado un poco nuestras exigencias, ahora no podemos dormir en  un sofá y eso hace la búsqueda algo más complicada. Quizás Airbnb pueda ser una opción más acertada para estos momentos".

La pareja añade que "junio, julio y agosto son los meses fuertes en Vitoria-Gasteiz: durante la celebración del Azkena Rock Festival son días de muchas solicitudes".

  • Gorka

Para Gorka B. su primera experiencia como usuario de couchsurfing fue en el año 2010 en Zurich durante la realización de un Interrail que les llevó a vistar Paris, Viena, Bratislavia y Gante entre otras capitales. Junto a su amigo Alex optaron por el Couchsurfing en parte porque era gratis y principalmente, por la experiencia de convivir durante un tiempo con alguien que no conocían: "Conoces la ciudad desde el punto de vista del lugareño, te cuentan como se vive, sus costumbres, lo que ganan, etc.".

Gorka tenía 20 años en su primera experiencia y sus padres, especialmente su madre, no eran muy partidarios de la opción Couchsurfing. De hecho Gorka enviaba la dirección de las casas en que se alojaba para que su ama estuviese más tranquila.

Tras Amsterdam, Gante o Cracovia llegó Manchester, Bath, York o Londres en Reino Unido.

Gorka nunca ha sido anfitrión de ningún usuario pero no le importaría serlo. "Aunque la plataforma ha cambiado y ahora es el anfitrión quien invita a los usuarios a su casa. Anteriormente el viajero enviaba solicitudes a los usuarios disponibles en Couchsurfing y eso ha hecho que no este muy pendiente de la plataforma".

El gasteiztarra, quien también es usuario habitual del servicio BlaBlaCar que conecta conductores con pasajeros para viajar en coche compartido, recomienda Couchsurfing a gente abierta, personas a las que les guste conocer gente y que sean flexibles. "Te vas a encontrar todo tipo de gente y no es para todo el mundo", apunta Gorka.