Detesa enseña su fábrica para celebrar 20 años de soldaduras

11 marzo, 2023

Familiares y amigos de la plantilla visitan la fábrica de Detesa, atraídos especialmente por los brazos robóticos que sueldan las piezas

Detesa cumple 20 años y abre sus puertas para celebrarlo. Familiares y amigos de la plantilla han conocido este sábado cómo es la fábrica, y dónde acaban las piezas que fabrica esta empresa de soldadura y ensamblaje. "Está guay saber en qué trabaja tu hermano, tu madre, tu padre... Hay gente que no sabe qué está fabricando su familiar, y hoy lo han disfrutado". Y muchos pequeños han descubierto cómo son los robots que manejan sus padres y madres.

Porque los grandes brazos robóticos han sido la mayor atracción para los visitantes de la Jornada de Puertas Abiertas de Detesa. Máquinas automatizadas y programadas para ensamblar los distintos componentes en la nave de Larragana.

Detesa lleva 20 años en el Polígono de Betoño y da trabajo hoy a más de 90 personas en Vitoria-Gasteiz. Pertenece al grupo IPM RUBI, cuya empresa matriz es Estampaciones Rubí, proveedor directo del automóvil desde 1956. Estampaciones Rubí da forma a piezas metálicas que luego ensambla Detesa, o que van directas a las cadenas de montaje de las automovilísticas de todo el mundo.

¿Qué hace Detesa?

Detesa 20 años fábrica soldaduras

Detesa nació por una petición de Peugeot a Estampaciones Rubí: la marca del León necesitaba tuercas ya soldadas a las piezas metálicas que Rubí estampaba. Y así cinco personas fueron capaces de poner en marcha dos complejas líneas, totalmente robotizadas. Y comenzaron a fabricar, en tiempo récord, capós con el emblema mítico del León de Peugeot.

Detesa trabaja para los gigantes de automoción de todo el mundo

Hoy Detesa suelda metales para las carrocerías de Peugeot, Citröen, Porsche, Mercedes, Volkswagen y Opel. Cuenta con más de 20 líneas de soldadura para distintas partes de cada uno de los vehículos. Todas las líneas están automatizadas con brazos robóticos gigantes. Brazos que han dejado con la boca abierta a los más pequeños, al ver el robot que manejan sus padres y madres.

Detesa 20 años fábrica soldaduras

Las piezas más reconocibles son un capó, la tapa de un motor, una puerta, un techo solar... Con otros productos cuesta más acertar para qué sirven. Porque muchas quedan luego ocultas entre la carrocería y el tapizado. "Muchos son elementos metálicos que van dentro del coche y no se ven, que van ensamblados y soldados", explican desde Detesa.

Esos puntos de soldadura permiten conectar chapas o unir tuercas y tornillos a la estructura. Un golpe de calor que dura unos segundos y deja la pieza lista para su envío a la fábrica de montaje.

Un sector clave en Álava

Detesa 20 años fábrica soldaduras

La automoción mueve millones y millones de euros en Vitoria-Gasteiz. Hay decenas de empresas proveedoras de Mercedes y otros fabricantes. Y es que un solo vehículo tiene entre 70.000 y 90.000 piezas. Detesa crea varias de ellas. En su planta de Larragana trabajan 90 personas: una plantilla joven con una edad media de 40 años y un 25% de mujeres en el taller.

Detesa, como todo el sector del automóvil, también ha sufrido la crisis de componentes. Las paradas de sus clientes (las grandes marcas de automoción) han lastrado la salida de producto. Y el encarecimiento de la chapa y la energía también han disparado los costes de producción: "Los puntos de soldadura requieren un consumo elevado de electricidad para suministrar alta tensión".

Detesa mantiene la confianza de los clientes, en una época de competencia creciente con Asia y Europa del Esta. La evolución y el nivel tecnológico de la planta, así como las instalaciones y dimensiones de ésta, auguran un futuro de crecimiento. Y es que esta fábrica quiere seguir siendo referente en la soldadura para elementos de automóvil: “Veinte años generando empleo y riqueza que fluyen en el Territorio de Álava a través de sus proveedores y colaboradores”.