Un grupo de vitorianos pide a los vecinos de Abetxuko que convivan con Los Pichis

11 febrero, 2017

Los firmantes critican la actitud de los vecinos de Abetxuko

Un grupo de 26 vitorianos de diferentes asociaciones y movimientos ha presentado hoy un manifiesto por la convivencia en Abetxuko. En el manifiesto critican la actitud de los vecinos del barrio y 'perdonan' la forma en que llegaron Los Pichis a Abetxuko: "Podemos entender que su forma de llegar molestara, pero rectificando errores iniciales han dado muestra de su disposición al diálogo".

Entre los firmantes se encuentra el ex alcalde José Angel Cuerda, el portavoz de Salhaketa César Manzanos, Filomena Abrantes, Amelia Barquín, Manu Arakama, Rosabel Argote o Juan Ibarrondo. Los firmantes lo hacen a título individual, y no de las asociaciones que dirigen o en las que trabajan.

En el comunicado los firmantes piden acabar con los obstáculos por la convivencia pacífica de la familia Manzanares Cortés. Precisamente este viernes tuvo lugar una nueva manifestación en la Plaza Kañabenta "por la convivencia". A juicio de los vecinos que se manifiestan el problema de convivencia está generado por la llegada de Los Pichis. El documento de hoy, sin embargo, exime a Los Pichis de culpa y se la atribuye a los vecinos que se manifiestan en Abetxuko.

Por su interés reproducimos a continuación el contenido del documento redactado por estos 26 activistas de algunos movimientos sociales:

"Las persona firmantes queremos hacer un llamamiento público a la convivencia en el barrio-pueblo de Abetxuko. Sin pretender juzgar a nadie, sí queremos expresar nuestra honda preocupación ante los obstáculos a la convivencia pacífica con unas determinadas personas vecinas – la familia Manzanares-Cortés - que venimos observando en los últimos meses entre algunas de las personas residentes en Abetxuko, un barrio-pueblo que, a lo largo de su historia, se ha significado precisamente por su capacidad de acogida y por su solidaridad con las personas socioeconómicamente más perjudicadas y acogida de personas migradas.

Desde hace tiempo la familia Manzanares-Cortés ha dado muestra de su disposición al diálogo

Podemos entender que su forma de entrada al barrio molestara a bastantes personas vecinas debido a su comportamiento y acciones, pero pensamos que desde hace ya mucho tiempo la familia Manzanares-Cortés, rectificando errores iniciales, ha dado muestras suficientes de su disposición al diálogo y de su compromiso en intentar buscar una convivencia pacífica en Abetxuko.

Nos preocupa la respuesta de un número considerable de personas vecinas de este barrio-pueblo que, en esta ocasión, parecen estar centrando sus esfuerzos, no tanto en la búsqueda de más vías de diálogo y entendimiento, como en la expulsión de la familia Manzanares-Cortés del barrio, causando un enfrentamiento que repercute en perjuicio de todas y todos. Algo totalmente opuesto al sentido comunitario de una convivencia basada en la resolución de los conflictos por medio del diálogo, la pedagogía social y la empatía o capacidad de intentar ponerse en la piel del prójimo.

Dada la situación de enquistamiento de la fractura en la convivencia vecinal de Abetxuko, al igual que creemos que es necesario opinar públicamente llamando a la reflexión y al diálogo, como ahora lo hacemos nosotras, pensamos que es urgente e inaplazable una intervención -también pública- institucional (Ayuntamiento, Síndico, Ararteko, Gobierno Vasco u otras instituciones con capacidad de intervención).

Una intervención para implementar sin más demora las medidas y decisiones necesarias para, además de garantizar los derechos y las correspondientes obligaciones de las personas para residir libremente y en paz allá donde decidan, poner en marcha los mecanismos de mediación necesarios para restablecer la convivencia vecinal en Abetxuko. Insistimos en que es urgente e inaplazable la solución dialogada puesto que son demasiados meses ya de una situación social negativa sobre la que, si no se actúa con rapidez, podría traer consigo consecuencias sociales peores para la convivencia justa y en paz.

Creemos que, desde el respeto al proceso propio del barrio-pueblo de Abetxuko, nuestro llamamiento público a la convivencia no debe ir más allá de lo aquí recogido, pero no queremos acabar sin señalar que las personas firmantes de este escrito estamos a disposición de todo el vecindario de este pueblo-barrio para colaborar en lo que sea conveniente a fin de conseguir la recuperación de ese carácter solidario y de acogida con el que siempre hemos sentido que nos abría sus puertas este gran barrio-pueblo que es Abetxuko".

Los firmantes son personas relacionadas con asociaciones en defensa de los derechos humanos.