El Biceberg: un parking de bicis convertido en escultura

3 diciembre, 2012

El acceso a las instalaciones deportivas de Mendizorroza cuenta desde hace nueve años con una escultura símbolo del derroche institucional. El llamado Biciberg lleva prácticamente desde su inauguración sin funcionar debido a sucesivos problemas. La instalación, como su nombre indica, sólo deja ver una pequeña parte de su infraestructura. Y es que el dispositivo está […]

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El acceso a las instalaciones deportivas de Mendizorroza cuenta desde hace nueve años con una escultura símbolo del derroche institucional. El llamado Biciberg lleva prácticamente desde su inauguración sin funcionar debido a sucesivos problemas. La instalación, como su nombre indica, sólo deja ver una pequeña parte de su infraestructura. Y es que el dispositivo está concebido para introducir la bici y, mediante un montacargas y diversas instalaciones mecánicas, aparcarla en el subsuelo, de forma segura.

Lo que parecía una excelente idea se ha convertido en un símbolo del derroche debido a los numerosos y reiterados fallos, que llevaron al consistorio a renunciar a él tras haber desembolsado 156.263 euros. Además, el consistorio sigue pagando una póliza anual por ello.

Sin embargo, el Biceberg de Vitoria no es el único Biceberg que no funciona. En el caso de Zaragoza ocurre lo mismo con uno del Casco Viejo, mientras que otro ubicado en su campus universitario recibió el 2011 más de 14.000 bicicletas. La falta de un mantenimiento adecuado y un servicio técnico permanente parecen ser las causas para que en más de una localidad las instituciones hayan acabando renunciando a ellos.

La compañía que desarrolló el Biceberg, que mantiene en su portada el Biceberg de Vitoria, gestiona ahora algo similar llamado Bigloo.