El funeral del agro alavés: "Nos vamos a la mierda"
El agro alavés denuncia que el sector está herido de muerte
El sector agrícola y ganadero de Álava ha celebrado este jueves su propio funeral por las calles de Vitoria-Gasteiz. Un cortejo fúnebre que ha recorrido las calles del centro. Allí, con el ataúd al hombro, han vuelto a denunciar la situación de un sector vital para muchos municipios alaveses.
UAGA ha denunciado que el sector agoniza y morirá si no hay cambios. En la manifestación había un tractor, tras el cual iba un sacerdote y el féretro llevado a hombros por agricultores y ganaderos. Tras ellos una pancarta muy directa: "Nos Vamos a la Mierda, Pikutara Goaz".
Estas son las denuncias del sector:
- Costes de producción cada vez más altos.
- Contratos de venta por debajo de esos costes, pese a que la Ley de la Cadena Alimentaria lo prohíbe.
- Merma drástica de las cosechas por las incidencias climatológicas. Y las ayudas no llegan a todos los colectivos, pese a los anuncios de los políticos.
- Las instituciones han dejado escapar la paja de nuestro territorio que se ha destinado a biocombustible, mientras se traía forraje de fuera a un coste más alto y a todas luces insuficiente. "Una vez más se ha dejado pasar la oportunidad de fomentar los tratos directos entre agricultores y ganaderos", denuncia UAGA.
- Los sectores ganaderos, además, ven amenazadas sus explotaciones por una nueva epidemia: la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica.
- La amenaza del lobo: “Resulta hiriente que la sociedad valore más las molestias que los mastines pueden generar a los montañeros que los daños que el depredador produce en el sector y el sobrecoste que estos animales suponen para los pastores”, lamentan desde UAGA.
- El aumento de la burocracia y el papeleo.
- Las instituciones “ofrecen a los grandes oligopolios energéticos las mejores tierras de Álava para diversos proyectos: placas solares, líneas de Alta Tensión, Tren de Alta Velocidad... Estamos a favor de las energías renovables y el transporte sostenible, pero no a costa del sector primario”.
- “Asedio al sector con rigurosas inspecciones en campo que obstaculizan el desarrollo de las campañas y, en ocasiones, criminalizan
al sector por cuestiones ajenas a su capacidad". - Merma de las producciones tradicionales frente al apoyo a macroproyectos como la industria tomatera de Tuesta, "ajena a la producción local, cuestionable desde el punto de vista medio ambiental y que tampoco ha generado la riqueza que prometía para el medio rural".
noticia anterior
Estos 4 bares de Vitoria ya son Soletes Repsol
Tres locales de Sancho el Sabio se suman a la Guía de Soletes Repsol
noticia siguiente
Aparecen "microorganismos" en el menú de un comedor escolar
La empresa que sirvió estos platos también sirvió la misma comida con gusanos en colegios de La Rioja