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21 de abril
Vitoriana de Electricidad: cómo llegó la luz a las calles y casas de Vitoria
La luz llegó a Vitoria en 1892, y hasta los años 90 Vitoriana de Electricidad fue la empresa que suministraba energía a los hogares de Vitoria-Gasteiz
La electricidad no llegó a Vitoria-Gasteiz hasta 1892. Ese año Sociedad Electra Vitoriana empezó a suministrar electricidad con unos generadores movidos por vapor. Estaban en el primer tramo de la calle Beato Tomás de Zumárraga, donde una escultura aún lo recuerda.
El débil desarrollo industrial existente en aquella época en el territorio retrasó unos años respecto a otras zonas la electrificación. Pero a principios del siglo XX el alumbrado eléctrico ya había sustituido casi por completo a las farolas de gas. Fue otra empresa la que hizo este tendido para el alumbrado: Electro Hidráulica Alavesa.
Plaza Juan de Ayala en 1965. Al fondo chimenea de Vitoria de Electricidad. ARQUÉ. AMVG
Pese al reducido tamaño de la población alavesa que no alcanzaba los 100.000 habitantes, en 1905 se creó Sociedad Cooperativa de Electricidad, S.A. para competir con las otras dos ya existentes. El surgimiento de esta tercera empresa trajo consigo el primer acuerdo entre las empresas eléctricas Sociedad Cooperativa de Electricidad y Electro Hidráulica Alavesa en 1916 para la distribución y suministro de la electricidad.
Durante los años siguientes el suministro eléctrico se extendió con no pocas dificultades entre particulares e industrias. Pero la deficiente red eléctrica de la época obligó a la empresa Ajuria, la más grande del territorio por aquel entonces, a tener su propia central eléctrica para poder mantener su producción.
A comienzos del siglo XX había tres eléctricas en Vitoria, que en los 50 fueron adquiridas por Iberduero (Iberdrola)
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En 1943 la empresa Sociedad Cooperativa de Electricidad cambió su denominación a Vitoriana de Electricidad.
Subestación eléctrica situada en la antigua N-1 a la altura de la clínica Arana. Anuncio de Vitoriana de Electricidad. Revista fiestas Vitoria-Gasteiz 1976.
No fue, sin embargo, hasta la década de los cincuenta cuando se llevó a cabo la verdadera modernización en la electrificación alavesa. La empresa Iberduero, actual Iberdrola, compró por aquel entonces Vitoriana de Electricidad y absorbió Hidráulica Alavesa. Desde entonces y hasta principios de los 90 operó con el nombre de Vitoriana de Electricidad.
La compra posibilitó el tendido de una línea de alta tensión entre las subestaciones de Puentelarrá y de Ormaiztegui y, a su vez, con la frontera francesa. Esta nueva línea sustituyó al viejo tendido de postes de madera, que era el único existente hasta la fecha y que resultaba insuficiente para aquella época. Vitoria-Gasteiz quedó conectada a esta nueva línea de alta tensión con la construcción de la subestación de Ali. Fue un gran salto que permitió establecerse a nuevas industrias sin deficiencias en el servicio.
Anuncio Vitoriana de Electricidad en la Revista de fiestas de Vitoria-Gasteiz en 1977.
En los 50, al igual que en el resto del país, se amplió la potencia de la red y se iniciaron los soterramientos de tendidos eléctricos. Los cables de baja tensión fueron desapareciendo de las fachadas. Sin embargo, el rápido crecimiento y la falta de planificación de algunas zonas de la ciudad excluyó a algunos barrios como Adurza o Ariznabarra entre otros de un cableado subterráneo durante años. De hecho en Ariznabarra se retiró hace años y en Adurtza y Abetxuko aún están en proceso.
Los cincuenta finalizaron con la inauguración de los embalses del Zadorra y de la central hidroeléctrica situada en Barazar-Undurraga. Altos Hornos de Vizcaya fue la empresa promotora de la obra, que necesitaba generar electricidad suficiente para poder funcionar.
Tendido eléctrico cercano a la subestación de Ali hacia 1978. Fondo Fundación Sancho el Sabio.
Las subestaciones de Ali, Gamarra y Los Astrónomos suministraban electricidad a Vitoria
En los 60 y 70 el consumo eléctrico creció exponencialmente por la industrialización. A finales de los setenta Vitoria-Gasteiz tenía tres subestaciones transformadoras: la de Ali, otra situada en Gamarra y otra en las proximidades de la N-1 a la altura de la clínica Arana.
Y Álava se situaba en los primeros puestos en electrificación gracias a la cooperación entre la Diputación Foral y Vitoriana de Electricidad. La luz llegaba entonces a casi toda la provincia. Así a mediados de los ochenta el número de abonados superaba los 105.000.
Tapa de arqueta de Vitoriana de Electricidad en la calle Castillo de Quejana.
Los años noventa y el Mercado Único Europeo acabaron con las pequeñas empresas eléctricas de provincia, entre ellas Vitoriana de Electricidad. Aunque, en realidad, esta empresa ya estaba integrada en Iberdrola.
Tapa de arqueta de Vitoriana de Electricidad en la calle Etxezarra.
Hoy en día algunas tapas de alcantarilla con las iniciales VE y la escultura Argiola situada en la calle Beato Tomás de Zumárraga, donde en su día estuvo Vitoriana de Electricidad, nos recuerdan la existencia de esta empresa local.
