Dos empresas optan a gestionar el bar del Jardín de Falerina

Dos empresas optan finalmente a gestionar la cafetería del Centro Cultural Montehermoso. Inicialmente fueron cinco las empresas interesadas pero finalmente son dos las que optan a la adjudicación.

Hasta la llegada de Hor Dago el Jardín de Falerina dio numerosos bandazos. Sin embargo Hor Dago concluyó a finales de 2016 el contrato de gestión. Aún así durante todo 2017 siguió abierto gracias a una prórroga realizada a petición del Ayuntamiento.

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El nuevo adjudicatario gestionará la cafetería por un periodo de cinco años, y tiene algunas limitaciones respecto al anterior: impide la instalación de carpas, barras o barbacoas en el jardín. Tampoco permite colocar veladores (mesas y sillas) en el jardín. A cambio el Ayuntamiento gestionará directamente la programación cultural en este jardín. Si el adjudicatario quiere realizar alguna actividad deberá solicitarlo con dos meses de antelación.

Y en caso de que los técnicos le den el visto bueno, el hostelero deberá registrar la correspondiente solicitud de autorización de ocupación del espacio público y administrativa del evento al Departamento de Medio Ambiente y Espacio Público así como pagar la tasa que corresponda por ocupación de dominio público.

"Discrepamos mucho de que sea más restrictivo: nosotros vamos a programar en el jardín. Es restrictivo porque es lo que dice la normativa", ha asegurado la concejala de Cultura Estibaliz Canto.

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• Fracasos anteriores

Este espacio ubicado en lo alto del Casco Viejo es de propiedad municipal y la gestión de la Cafetería depende de Montehermoso. La aventura del equipo liderado por Iker Arroniz (que anteriormente gestionó el Gora) y A Fuego Negro ha sido la más duradera en esta ubicación en los últimos años, y la actividad hostelera ha estado acompañado de otras actuaciones. Aunque el concurso acabó en verano de 2016, finalmente se amplió durante más de año y medio su presencia.

Anteriormente otros hosteleros como los del Dublín ya gestionaron este espacio, aunque ninguno de ellos consiguió rentabilizar un espacio con una enorme potencialidad. Un espacio que buscaba un público joven e inquieto con la vida cultural.

Hor Dago! nació hace 5 años, tras unas obras en el espacio interior, donde se adaptó la cocina para poder elaborar pintxos y ofrecer comidas. Sin embargo, el punto fuerte de este local está en su enorme terraza, tanto en la parte inferior como en el jardín. En estos últimos años los conciertos y actuaciones han sido constantes en verano, con la instalación de una carpa. Incluso el último verano amplió su oferta con la instalación de una barbacoa, y ha organizado también la Feria de la Cerveza.

Los bares municipales han sido en numerosas ocasiones un quebradero de cabeza con las adjudicaciones: las cafeterías de La Florida alternaron durante muchos años diversos gestores, sin dar con la tecla hasta que Zabaltegi se hizo cargo de la gestión. Peor aún ha sido El Mineral, donde el edificio está completamente destrozado.