FOTOS - Aldaialde estrena curso y colegio. ¿Cómo es?
Tras 9 años en barracones, 580 txikis de Infantil y Primaria han inaugurado el espacioso colegio de Borinbizkarra
"Muy luminoso", con patio cubierto y mucho espacio. Son algunas de las principales bondades que elogian las familias de Aldaialde, que inician el curso estrenando, por fin, nuevo colegio.
Tras 9 años en los barracones, contar con un recinto propio es, ya de por sí, motivo de alegría. Y más si implica huir de las estrecheces y tetris para encajar a un alumnado creciente en un espacio que se había quedado pequeño.
Coger rodaje
Ahora, los 580 txikis de Infantil y Primaria que han comenzado el curso disfrutan de una superficie construida de 5.598 metros cuadrados. En ella se reparten 43 aulas (para 2 años, Educación Infantil y Primaria, psicomotricidad, inglés, música, usos múltiples, informática, siesta, laboratorio, desdoble o trabajo en grupo).
Además de biblioteca, gimnasio, vestuarios, pista deportiva cubierta, comedor, cocina propia y dos patios de recreo. Uno de Infantil, cubierto y con acceso directo desde las aulas en planta baja. Y otro de Primaria, con zonas verdes y campo de fútbol.
"No tiene nada que ver con lo anterior. Hemos pasado de contar con una planta a tres, todo es mucho mejor. Estamos muy contentos", reconocen desde la dirección de Aldaialde. Eso sí, como en cualquier mudanza, señalan que ahora toca ir acondicionando todo.
"De no tener casi espacio, ahora tenemos mucho y nos toca aprender a gestionarlo, ver qué nos pide el día a día según el rodaje y las necesidades. Iremos con calma, poco a poco. Ensayo y error", indican.
Muy luminoso y con la cocina pendiente
Planteamiento en el que hay que tener en cuenta que en el colegio, con capacidad para unos 700 estudiantes, faltan aún dos cursos de 6º de Primaria por llenarse. Algo que ocurrirá el próximo año.
Hasta entonces, las familias que lo han estrenado aguardan expectantes la próxima semana, cuando comiencen las citas con el profesorado y las reuniones de la AMPA. Será entonces cuando puedan descubrir de primera mano las instalaciones.
Por ahora, y a través de lo que les han contado sus hijos, las primeras impresiones, en general, son positivas. "Dicen que las 'gelas' son un poco más pequeñas que las de los barracones. Pero la luz natural debe de ser brutal. Mi hijo dice que una 'pared' es todo ventana y empieza por debajo de su cintura", comenta una madre.
Advierte, eso sí, de que la cocina "aún no está en marcha, traen la comida hecha. Pero está previsto que cocinen allí, no se sabe cuándo". Uno de esos ajustes a tener en cuenta.
¿Instituto con Bachillerato?
"Imaginamos que, como en todo, habrá cosillas que mejorar. Pero por ahora, todo está bastante bien. Por lo que nos dicen las niñas, parecen estar contentas", se suman Patricia y Jennifer.
A falta de conocer el colegio más en detalle, agradecen disponer de "un edificio propio, en lugar de los prefabricados". Sobre todo, tener un patio cubierto "para que estén a resguardo de la lluvia, que aquí ya se sabe lo que pasa con el tiempo".
Otro punto a favor es que, en la parcela anexa al colegio Aldaialde, se levantará el instituto para alumnado de ESO. Aún no hay fecha prevista para que sea una realidad pero, una vez listo, la transición de uno a otro, en términos de logística, será cómoda para las familias.
Eso sí, ambas madres reclaman a Educación que acoja también los cursos de Bachillerato. "Para que tengan todo seguido aquí, sin tener que andar yendo a otro sitio", apuntan. Y añaden una reflexión: "Habrá mucha demanda en este barrio, con la cantidad de niños que hay y todo lo que se está construyendo…", advierten.
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