FOTOS: Así está el Híper Eroski de Asteguieta 42 años después

El de Asteguieta fue el primer hipermercado de Eroski y el primer establecimiento de la cooperativa en Vitoria-Gasteiz. Abrió sus puertas un 1 de diciembre de 1981 y estuvo en funcionamiento hasta 2003, momento en el que Eroski se trasladó al Centro Comercial El Boulevard.

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Hoy, 42 años después de su llegada a Asteguieta y 20 años después de su cierre, el hipermercado presenta un claro estado de ruina. Mientras, Eroski no ha hecho frente a un problema que acompaña a la cooperativa desde hace dos décadas. Además, la imposibilidad de dar salida al espacio y la dejadez de la firma, ha provocado que el pabellón sea explorado tanto por grafiteros como por personas aficionadas al Urbex, aquellas a las que les gusta acceder a edificios en estado de abandono.

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El Híper Eroski de Asteguieta 42 años después

Desde la carretera que nos lleva al pueblo de Asteguieta llaman la atención tanto el edificio, en el que la vegetación va ganando terreno, como su parking, una amplia zona por la que los vecinos pasean y que un equipo de críquet utiliza como campo de entrenamiento los fines de semana.

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La maleza se ha apoderado de la zona de los muelles, la más próxima al cauce del río Zadorra. Allí, se pueden reconocer entre arbustos y acumulación de basuras, los puntos en los que los camiones llegaban cargados para abastecer al que en 1981 se convirtió en el primer hipermercado de Vitoria-Gasteiz. Igualmente, se distinguen los puntos de entrada al híper, aquellos que daban acceso a una gran galería llena de tiendas y que hoy se encuentran tapiados.

Adentrarse en la antigua área comercial es hacerlo en un lugar oscuro y siniestro en el que cualquier ruido te sobresalta. Los escombros y los cristales rotos se acumulan en el suelo y entre ellos, la vegetación se abre paso.

Apenas quedan signos de que aquello fuese un gran establecimiento comercial con más de 8.000m² de sala de ventas. Esas paredes que sujetaban las estanterías repletas de alimentos en los 80 y 90, son hoy lienzos donde cientos de grafiteros dejan su impronta.

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Dado el estado de este edificio, acceder al mismo conlleva unos riesgos que tanto las instituciones como la entidad propietaria de los terrenos parecen obviar. Así mismo, han sido numerosas las quejas del vecindario de Asteguieta durante este largo periodo, pero estas no han obtenido el resultado que se esperaba. Y hoy, entrar en este espacio en ruinas sigue siendo tarea fácil para aquellas personas que quieran hacerlo.

Un edificio abocado al derrumbe

El edificio se encuentra ubicado junto al río Zadorra, en unos antiguos campos de cereal y en una zona calificada como inundable. Por ello, resulta prácticamente imposible que tenga un nuevo uso. Durante sus 22 años de actividad, fueron varias las ocasiones en las que parking, muelle e incluso el área de comercio se inundaron ante la crecida del Zadorra.

En el año 2011, con el pabellón completamente saqueado, se sellaron las entradas al mismo para evitar el acceso de personas y así, reducir riesgos. Pese a ello, los curiosos no tardaron en encontrar la forma de colarse en un edificio en estado ruinoso.

El antiguo Híper Eroski de Asteguieta está abocado al derrumbe, pero el alto coste de esta operación hace que se esté dilatando en el tiempo. Parece no haber otra solución posible.