"La posible apertura de Garoña es un ataque a Álava y responsabilidad del PP"

24 enero, 2017

Los técnicos del CSN avalan la reapertura de la central a cambio de mejoras en seguridad

La Central Nuclear de Garoña sigue dando pasos hacia su reapertura. Durante las campañas electorales unos y otros se empeñaron en decir que Garoña no iba a abrir: Incluso desde el PP fueron enérgicos contra esta apertura.

Pero ahora los técnicos del Consejo de Seguridad Nunclear han vuelto a avalar la reapertura de esta central, para que opere de forma prolongada. Se trata de una nueva estrategia en la pantomima que desde 2012 ha mantenido el Gobierno con Garoña.

Ramiro González considera que, si se produce la apertura, es "algo gravísimo, inaceptable, un ataque a Álava". Además ha señalado a Javier Maroto, que "ya no puede decir que no es partidario de la apertura, porque está a la derecha de Rajoy, o a la izquierda. Al igual que Alonso son cómplices de esta situación, y no me vale como explicación decir que no está de acuerdo, como ha hecho Comerón".

El PP de Álava debe impedir la reapertura de Garoña

En un tono muy duro, Ramiro González ha vuelto a mostrar su rechazo a la reapertura: "Yo responsabilizo al PP de Álava de esta situación, y su obligación es impedirlo si de verdad quieren defender mínimamente los intereses de Álava".

  • Medidas de seguridad

El CSN considera que Nuclenor deberá realizar nuevas medidas de seguridad para poder acometer esta reapertura. Algunas de estas medidas ya están asimiladas por Endesa e Iberdrola, que han ido realizando ciertas acciones en los últimos años.

En realidad la propuesta del CSN habla de una ampliación sin fecha límite, aunque la solicitud de licencia de Iberdrola y Endesa es, por ahora, hasta 2031. Este nuevo capítulo deja ahora la decisión en manos de los miembros elegidos por los partidos políticos. Una vez que se considera viable la apertura de forma técnica, la reapertura es una decisión únicamente política.

Eguzki ha reclamado el cierre de la central, y ha recordado que Nuclenor tiene pendiente la resolución del recurso interpuesto ante la decisión de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia de imponerle en julio de 2014 una multa de 18,4 millones de euros por detener su reactor en diciembre de 2012 «sin autorización», así como el recurso contra la decisión de la Confederación Hidrográfica del Ebro de exigirle medidas que refuercen la refrigeración del agua que toma del río Ebro.

"Garoña debería haber estado cerrada hace mucho tiempo por vieja, por peligrosa, por innecesaria, por estar amortizada, porque lo demanda la sociedad. La ciudadanía y mayoría política del territorio de Araba se ha posicionado en multitud de ocasiones, reclamando la paralización de todos los trámites para su autorización, y posteriormente el desmantelamiento, para garantizar el cierre definitivo e irreversible". Para Eguzki, no hay criterios económicos, ecológicos ni democráticos que avalen la reapertura de la central nuclear de Garoña.