La Diócesis de Vitoria gasta unos 2 millones al año en mantener sus inmuebles

Los gastos habituales de funcionamiento de los edificios eclesiásticos suponen para la Diócesis de Vitoria una inversión anual en torno a los 2 millones de euros. Con esta cantidad económica paga las facturas de luz, agua y calefacción, acomete pequeñas reparaciones o contrata los servicios de limpieza en todos sus inmuebles, según apuntan fuentes de la Diócesis.

La Diócesis de Vitoria es dueña del complejo del Seminario Diocesano de Vitoria, cuyo edificio principal ocupa 10.437 metros cuadrados. También cuenta con otros inmuebles, algunos de los cuales están arrendados.

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En el apartado religioso cuenta con 421 parroquias diseminadas por Álava, Orduña (Bizkaia) y el Condado de Treviño. Esta lista incluye las dos catedrales de la capital alavesa. La Diócesis no abona el IBI por todos estos inmuebles, según establece el concordato que mantiene el Vaticano con el Gobierno.

La última memoria del episcopado, correspondiente a 2015, establece que los gastos ordinarios para la conservación y el funcionamiento de estos edificios se situaron en 2.041.767,28 €. Y supusieron un 23,07% del desembolso total, que ascendió a 8.850.325,77 €.

Los gastos extraordinarios, por su parte, cubren la construcción de nuevos templos y los programas de rehabilitación de iglesias, casas curales, centros parroquiales y obras de arte. La Diócesis invirtió hace dos ejercicios 1.755.372,97 € (19,83%) en este concepto.

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Además, la suma de los salarios del personal eclesiástico ascendió en 2015 a 2.050.633,94 € (23,17%), mientras que la retribución seglar o civil le costó a la Diócesis 692.658,39 € (7,83%). La mayor cantidad de dinero, de 2.309.893,19 € (26,1%), se destinó a desarrollar actividades pastorales y asistenciales, a ayudar a la iglesia universal y a otras entregas a las instituciones diocesanas.

• Ingresos

Por otra parte, en 2015 la Diócesis de Vitoria ingresó 1.447.531,97 € por el alquiler de inmuebles y diversas actividades financieras y económicas. Esta cifra equivale al 16,28% del total, que alcanzó los 8.890.247,96 €. La venta de patrimonio, subvenciones de capital y otros ingresos extraordinarios supusieron 967.553,63 € (10,88%).

La asignación tributaria, a través del 0,7% del IRPF que la ciudadanía elige destinar al sostenimiento de la Iglesia, constituyó la mayor fuente de ingresos. En concreto, le reportó a la Diócesis de Vitoria 2.813.896,49 € (31,65%). Los fieles aportaron voluntariamente 2.009.902,33 € (22,61%) a través de colectas en las parroquias o suscripciones.

Otros 1.651.363,54 € (18,58%) correspondieron a los ingresos corrientes, que derivan de las subvenciones públicas o las retribuciones por servicios prestados.