El Greco: un tesoro desconocido en la Catedral Nueva
2014 será el año más especial para la obra de El Greco: Doménikos Theotokópoulos. Durante la celebración del cuarto centenario de su muerte se desarrollarán varias actos conmemorativos, sobre todo en Toledo, ciudad en la que disfrutó de sus mejores años. El Museo Diocesano de Arte Sacro de Vitoria también se unirá a esta celebraciones, dedicando […]
2014 será el año más especial para la obra de El Greco: Doménikos Theotokópoulos. Durante la celebración del cuarto centenario de su muerte se desarrollarán varias actos conmemorativos, sobre todo en Toledo, ciudad en la que disfrutó de sus mejores años.
El Museo Diocesano de Arte Sacro de Vitoria también se unirá a esta celebraciones, dedicando la campaña Hona Hemen, desde abril a septiembre, a la obra “San Francisco meditando de rodillas” del Greco. Este cuadro se expone de forma permanente en el Museo desde abril de 1999.
La Diputación Foral de Alava compró está pieza a los Herederos de Ramón de la Sota y Aburto en 1982. En 1999 fue limpiado y restaurado por el taller El Gabinete de Bilbao. Fue entonces cuando el historiador Fernardo Tabar certificó que realmente se trataba de un trabajo del Greco y es que años atrás, autores como Whetey creían que esta obra podría haber sido pintado por alumnos de su taller.
Son más de cien las imágenes salidas del taller de El Greco que representan a San Francisco, uno de los santos más admirados por la Contrarreforma. Se consideran unas 25 originales, mientras que en las demás encontraríamos la mano de los colaboradores y cuyo destino serían las parroquias, los conventos y los particulares toledanos.
El ascetismo y la espiritualidad están perfectamente recogidos en todos los trabajos. El santo, arrodillado, se lleva las manos al pecho en actitud de oración y dirige su concentrada mirada hacia el crucifijo, junto a la calavera y la Biblia sobre una roca. La figura se recorta ante la cueva, dejando en la esquina superior derecha un ligero espacio para el cielo nublado; en la esquina contraria encontramos el único toque de color del cuadro, el verde de las ramas en la entrada a la cueva.
Sus rasgos afilados, con la nariz y los pómulos salientes, son exaltados gracias al foco de luz, al igual que las manos. En el País Vasco solo existe cuatro pinturas del Greco, dos son propiedad del Museo de Bellas Artes de Bilbao y de la Diputación Foral de Alava respectivamente, mientras que las otras dos pertenecen a coleccionistas privados. Estas cuatro obras fueron expuestas en el Museo Diocesano de Arte Sacro de Alava en 2005.
Ubicación: Museo Diocesano de Arte Sacro (Catedral Nueva)
Horario:
De martes a viernes:11:00-14:00 y 16:00-18:30
Sábados, domingos y festivos:11:00-14:00
Lunes: cerrado
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