Huelga de funcionarios este miércoles en Euskadi

El sector público de Euskadi va a la huelga este otoño. ELA, LAB, CCOO, Steilas, SATSE y ESK han convocado dos jornadas de huelga. Y la primera será este miércoles 25 de octubre.

Huelga con la que exigen "garantizar el poder adquisitivo y reducir la temporalidad al 8% en el Gobierno Vasco, Diputaciones y Ayuntamientos". Los convocantes suman el 85% de la representación en Euskadi. La huelga llega además en un momento de tensión con el Gobierno Vasco, tras las acusaciones de Urkullu de "populismo" y de "engañar a la gente".

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ELA, LAB, CCOO, Steilas, SATSE y ESK denuncian el deterioro de los servicios públicos, "con un empeoramiento de las condiciones laborales, que inciden directamente en la calidad del servicio que se ofrece a la ciudadanía".

Los sindicatos denuncian la "pérdida de poder adquisitivo, la alta temporalidad y las continuas privatizaciones de servicios". "Ya hay unas 100.000 personas subcontratadas en Euskadi".

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"La pandemia dejó en evidencia las consecuencias de este deterioro. Tres años más tarde, lejos de revertir esta situación, las instituciones vascas alardean de superávit para engordar los beneficios privados", aseguran los convocantes.

Los convocantes piden poder decidir en Euskadi los salarios y las necesidades de empleo público. Y, al mismo tiempo, reclaman en Euskadi unos "presupuestos que permitan reforzar los servicios públicos, crear y consolidar empleo público, mejorar las condiciones de trabajo y recuperar el poder adquisitivo perdido".

A la huelga están convocados los trabajadores públicos de las administraciones de Euskadi: educación, sanidad, servicios sociales, administrativos,...

Las reivindicaciones

Estas son otras medidas que reclaman los convocantes:

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En salarios:

• Incremento salarial del 10%. Para recuperar la pérdida de poder adquisitivo de los dos últimos años y garantizar el de 2024.
• Reconocimiento de deuda sobre el poder adquisitivo perdido anteriormente y compromiso real de recuperación.

En empleo:

• No más privatizaciones. Y acordar la reversión de lo privatizado garantizando la subrogación de la plantilla.
• Aflorar el empleo oculto estructural y acordar los puestos a crear.
• Situar la temporalidad real debajo del 8%, tomando las medidas necesarias en los colectivos que no se dé, y acordando para ello los calendarios de OPE necesarios y las consolidaciones de los/as trabajadoras y trabajadores en los puestos cubiertos hasta ahora.
• Acordar la imposibilidad de contratar a tiempo parcial (de manera impuesta)
• Medidas para el rejuvenecimiento de las plantillas: Contrato de relevo en las mejores condiciones para todos los trabajadoras/es públicos. Recuperación de las primas de jubilación y reducciones de jornada.

Salud laboral:

• Acordar medidas concretas para reducir las cargas de trabajo.
• Garantizar una formaciones adecuada y adaptada.
• Realizar evaluaciones de riesgos psicosociales y ergonómicos para garantizar el bienestar físico y emocional de los trabajadores y trabajadoras e introducir las medidas correctoras necesarias.
• Reforzar el control público de la salud de las/os trabajadores públicos, restringiendo el papel de las mutuas.

Euskara

• Acordar planes que garanticen la euskaldunización real de la Administración. Para ello:
• Garantizaran las condiciones, formación y recursos necesarios para la euskaldunización del personal que ya está trabajando.
• El personal que entre por primera vez en la administración garantizara el nivel de euskara exigido en su puesto.

Reducciones de jornada hacia la semana laboral de 32 horas.

Medidas en clave de genero que supongan pasos reales para la igualdad, entre ellos acordar la negociación de planes de igualdad reales y eficaces.

Respuesta del Lehendakari

El Lehendakari Iñigo Urkullu ha publicado este lunes en Deia un artículo en el que critica esta huelga y la actitud del funcionariado: "No se puede utilizar todo el dinero público, los ahorros de los ciudadanos, para pagar únicamente las nóminas de los funcionarios. Ese no es, al menos, nuestro modelo. Asumimos que nuestros recursos son limitados y, teniendo eso en cuenta, tratamos de mejorar cada día nuestros servicios públicos y las condiciones de los trabajadores públicos. Eso sí, dejando claro que, para avanzar como sociedad, es imprescindible ahorrar, invertir y proteger el mundo de la empresa".

Urkullu habla de "populismo" cuando se cuestiona el "deterioro de los servicios públicos", y asegura: "Puede hacer que se tambalee nuestro bienestar. No se debería utilizar a la gente para defender los intereses propios. No es legítimo engañar a la gente".