Iberdrola corta la luz a los edificios de Avenida de Olarizu

4 julio, 2019

Los edificios pertenecen a Ensanche 21, pero están habitados por decenas de okupas

Iberdrola, a petición del Ayuntamiento, ha cortado a primera hora de este jueves el suministro eléctrico en las viviendas de Olarizu. Técnicos de la compañía eléctrica han acudido, a instancias del Ayuntamiento, para retirar el cableado que alimentaba a estas viviendas.

Todas estas viviendas son ya de Ensanche 21 tras un proceso de expropiación y venta que se ha prolongado varios años. Las viviendas serán derribadas próximamente. Hace un mes las últimas viviendas pasaron a manos del Ayuntamiento y desde ese momento se pudo poner en marcha el corte de luz y de agua. También se está redactando ya el pliego para el derribo.

pisos avenida olarizuPolicía Local ha tenido que acudir también al lugar ante las amenazas que han realizado varios de los okupas que se encuentran en la vivienda. Se han registrado también algunas discusiones y amenazas contra los vecinos de los edificios de enfrente. En las últimas semanas han sido constantes las riñas entre diversos grupos de ocupas.

Vecinos han mostrado a Gasteiz Hoy su temor por estas amenazas. Algunos de ellos han amenazado con ocupar las nuevas viviendas ubicadas frente a las condenadas al derribo cuando sus propietarios se vayan de vacaciones.

El Ayuntamiento trabaja en el proceso de derribo de los edificios de Avenida de Olarizu. En las últimas semanas se han tapiado algunos de los portales, aunque otros permanecen ocupados por grupos muy heterogéneos: desde familias hasta personas sintecho y otras con problemas sociales o mentales. El Ayuntamiento mantiene en el juzgado las órdenes de desalojo que se producen de forma paulatina una vez se van aceptando.

Estos edificios fueron construidos en los años 60 junto a Esmaltaciones. Desde hace casi una década estaban condenados al derribo. Sin embargo la ocupación continuada después espacios y la falta de acuerdo con todos los vecinos para su marcha ha ido retrasando el proceso de derribo el alcalde se comprometió a que en el plazo de un año todos los edificios sean historia.