Isabel Salud (IU): "Han triunfado los valores de la derecha"

Mientras en el conjunto del Estado la izquierda comienza a recuperar fuerza, en Euskadi la fractura en Ezker Batua-Izquierda Unida y la irrupción de nuevas fuerzas amenaza con fragmentar el voto de la izquierda. Ezker Anitza llega a los comicios con el apoyo de la organización federal, y con la obligación de realizar una campaña a pie de calle que permita ganar a varios de esos votantes confundidos entre tanta sigla de izquierdas. Isabel Salud es la cabeza de lista de la formación en nuestro territorio.

-Pese a los recortes y a sus críticas a la actuación política, Izquierda Unida no apoyó la huelga del pasado miércoles ¿Por qué?

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-En esta situación tan grave de recortes y retroceso que estamos viviendo, en el que las decisiones no se están tomando ni siquiera desde el Congreso, hay que buscar unidades de acción de los trabajadores. Y esa unidad de acción se tiene que dar allí donde se ha producido la agresión. Los recortes vienen desde el Gobierno de España, por ello es necesario que haya unidad de acción en todo el Estado. Una huelga en Euskadi divide a la clase trabajadora y no tiene tanta repercusión. Es más, en este momento tendríamos incluso que buscar alianzas a nivel europeo.

-Son el único partido de izquierdas federal con representación parlamentaria. ¿Pero cómo se puede traducir en el siglo XXI un programa de izquierdas?

-Con justicia social, con reparto de la riqueza y con democracia participativa.

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-¿Cómo se puede conseguir ese reparto de la riqueza?

-El reparto de la riqueza implica que la riqueza que generamos se distribuya de forma justa. En estos momentos los trabajadores hemos perdido poder adquisitivo. La diferencia fundamental entre izquierda y derecha está en cómo repartes la riqueza. En estos momentos estamos gobernados por una fuerza de derechas y está claro se pretende que paguemos los trabajadores una crisis que no hemos creado nosotros. La salida a la crisis determina la diferencia entre izquierdas y derecha. La subida del IVA, por ejemplo, es una salida de la crisis que carga la crisis sobre las espaldas de los ciudadanos, porque carga sobre los más pobres.

-Entonces, ¿qué decisiones se deberían tomar para salir de la crisis desde la izquierda?

-La salida de la crisis no se va a hacer recortando, sino ingresando. Se puede salir de la crisis sin gastar y muriéndote de hambre, o buscando ingresos.

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-Pero ya se han aumentado los ingresos con la subida del IVA

-Es que se pretende ingresar más a costa de los trabajadores y hay que buscar otras fórmulas de ingreso. Proponemos que se persiga el fraude fiscal, que en este país está entre el 20 y el 25% del PIB. Además, en los últimos años ha habido una política fiscal en la que se han bajado impuestos. El Impuesto de Sociedades ha bajado y el Impuesto de Patrimonio se ha llegado a eliminar. Hace unos años, en un momento en que los ingresos eran importantes, se optó por bajar impuestos a las rentas más altas. Era la idea de que había que facilitar el dinero al capital para invertir y crear trabajo, pero la realidad es que el Capital no invertía ese dinero en más trabajo, sino en la Bolsa, porque le resultaba más ventajoso.

-El número de parados sigue aumentando, y con ello se está elevando el riesgo de exclusión social. ¿Qué alternativa ven para crear empleo?

-Las medidas que han puesto en marcha no han sido efectivas. Llevamos años de reformas laborales que nos venden como creadoras de empleo, pero la realidad nos dice que no se crea empleo, que el paro va aumentando. Proponemos que el Estado cree empleo público por ejemplo en dependencia. Es un campo de actuación. Está claro que para crear empleo primero hay que ingresar más dinero.

-El desempleo está poniendo en riesgo la estabilidad del Sistema de la Seguridad Social

-Claro, porque la Seguridad social se financia con las cotizaciones de los trabajadores. Si no hay trabajadores cotizando, la Seguridad Social se resiente. Estamos en una lógica de reducir gastos en que se resiente todo el aparato del bienestar. Se resiente todo: las pensiones, la sanidad, la educación... Esto es un diseño también muy calculado. El objetivo del PP es la privatización de los servicios, porque hay una bolsa de capital en algunos sectores que buscan salida.

-Ustedes abogan por restar competencias en fiscalidad a las Diputaciones. ¿Por qué?

-Desde la izquierda siempre hemos defendido la armonización de los impuestos a nivel europeo. La construcción de un modelo europeo implica la armonizaciaón fiscal. El capital no tiene fronteras. Desde ese punto de vista en Euskadi hay tres Haciendas diferentes. Nosotros planteamos que, como mínimo, las competencias deberían pasar al parlamento Vasco.

-¿Y en un futuro unificarlo con el resto de España?

-En este momento estamos hablando del Parlamento Vasco y de unas elecciones. Pero es cierto que el objetivo es que la fiscalidad esté armonizada en todas partes.

-IU también ha mostrado siempre su apoyo a la libertad de movimientos de personas. Sin embargo, en los últimos tiempos es un debate presente en la calle la relación entre inmigración y delincuencia

-La economía hoy en día está muy relacionada y es internacional. Y muchas veces parece que la gente viene a nuestros países a comer pero no vemos que nosotros también sacamos a gente en otros países.

-Su programa electoral habla de "propuestas para una Euskadi en paz". ¿Qué propuestas son esas?

-Estamos en una situación mejor que hace unos años, cuando ETA estaba con la pistola en la mano. Pero partimos de varias condiciones: para nosotros es fundamental que las políticas tengan un respeto a los derechos humanos, y nosotros seguimos exigiendo a ETA su desaparición total. ETA sigue emitiendo comunicados y parece una especie de guardián del proceso. Nosotros también pedimos la puesta en marcha del Instituto de la Memoria, en el que creemos que se incluya no sólo a las víctimas de ETA, sino también a las de la dictadura franquista. Asimismo nosotros defendemos los derechos de todos los presos y hemos venido reclamando que se deroguen leyes excepcionales como la Ley de Partidos, de la que siempre nos hemos posicionado en contra.

-Si llegan al Parlamento, ¿hacia quiénes mirarán en posibles acuerdos?

-Mikel Arana ya lo dijo en su momento. Nosotros estaremos, en todo caso, al lado de Bildu o de PSE como fuerzas más cercanas, pero nunca pactaremos con PNV ni PP. Y nunca nos plantearemos formar parte de un equipo de Gobierno. Eso sí, nuestro apoyo vendrá condicionado por programas.

-En el maremagnum de fuerzas de Izquierda, ¿qué diferencia a Ezker Anitza-IU de EB o Equo?

-Lo principal es que quien vota a Ezker Anitza vota a IU. Se está jugando a la confusión, pero la referencia es Izquierda Unida, y nosotros somos Izquierda Unida. Es cierto que la explicación puede ser bastante complicada. Aquel que defiende un proyecto federal, eso se encarna en IU.

- ¿Qué sensaciones se tienen desde IU sobre Garoña, sobre su cierre?

-hasta que no se cierre vamos a mantener nuestro recelo. Hay que seguir trabajando para ello. Más allá de las sensaciones yo me fijaría en los hechos.

-¿Qué soluciones se plantean para Foronda?

-En este país, pese a ser muy pequeño tenemos cuatro parlamentos y tres aeropuertos. Es necesario racionalizar un poco todo esto. Es cierto que las infraestructuras son pensadas más para el negocio que para el ciudadano de a pie. Hay que tener una visión de país. Con el tren de alta velocidad y los aeropuertos hay que tener una visión de conjunto.

-¿En ese sentido sobran políticos, sobran cargos públicos?

-Esto es muy peligroso y se está jugando a la confusión. Nosotros hemos vivido 40 años de no política. Hay que tener en cuenta que el 80% de los cargos públicos de todo el estado no cobran. Son gente que están en política en sus ratos de ocio. Por ello me parece injusto un análisis de trazo grueso. Hay que racionalizar y habrá también que establecer un salario promedio para cargos públicos, porque no compartimos que un representante del pueblo cobre cifras astronómicas.

-Se habla mucho del otoño caliente que nos espera. ¿Son las protestas el camino para conseguir algo por parte del Gobierno?

Las protestas han caracterizado al movimiento obrero siempre, pero tienen que venir acompañadas de organización. Si salimos a la calle y luego nos vamos a casa para salir dentro de un mes, no sirve de nada. Nosotros pagamos impuestos y tenemos una economía pública en donde alguien gestiona nuestro dinero. Entonces no podemos desentendernos. Si nosotros no participamos en la administración de nuestro dinero es fácil que lo administren en función de nuestros intereses y no de otros. Hay mil formas de organización. Asociaciones de vecinos o partidos políticos son sólo algunas. Hoy en día hay muy poca participación. Las protestas son el inicio pero hay que consolidarlo.

-¿Hay poca participación en los partidos políticos o en la vida social?

-En general, no hay ni siquiera participación en los centros de trabajo. Es una derrota de la izquierda. Han triunfado los valores de la derecha y la gente se ha ocupado de lo suyo. Es verdad que en momentos de crisis hay más insolidaridad y hay miedo. Tendemos a ver y atacar al más débil, no al más fuerte. Es una tendencia normal. Pero sí es verdad que han ido calando los valores de la derecha. Y eso hay que cambiarlo.

-¿Se ha hecho también algo mal desde la Izquierda? Tocó fondo hace apenas 3 años, aunque ahora parece que resurge.

-La izquierda resurge ahora porque ve que las políticas que estaba haciendo Zapatero y ahora el PP nos están llevando al desastre. Te prometen una cosa que no llega. Hay un enfado social que se nota. Han creado el problema unos y luego lo tenemos que pagar a escote. Cabrea mucho que tengamos que pagar los desmanes de la banca entre todos.