Joaquín Castellón: el periodista vitoriano tras los Papeles de Panamá

Joaquín Castellón dirige el departamento de Investigación de La Sexta Noticias. Este vitoriano del 82 ha sido el rostro que ha informado sobre Los Papeles de Panamá, pero también de otras cuestiones más locales. Castellón pertenece al Consorcio de Periodistas, un grupo cerrado de 200 periodistas repartido por 70 países, que gestiona exclusivas a nivel mundial. Antes de llegar a La Sexta presentó un magazine en Álava 7. Viene cada dos meses a Vitoria-Gasteiz para "ver a la familia tomar un café en el Dublín y hacer algo de deporte". Pero, por ahora, le toca trabajar, y este mismo jueves informaba sobre Los Papeles de la Púnica.

• ¿Por qué apuesta La Sexta por la investigación en un medio tan frenético como la TV?

En La Sexta desde primera hora de la mañana a última de la noche hacemos periodismo. Pero es cierto que la investigación son, en ocasiones, proyectos a muy largo plazo; mucha inversión para algo que no sabes si va a salir y por dónde va a salir.

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Con Panamá Papers desconocíamos su impacto: si la gente lo iba a entender, si iba a gustar... cuando le pusimos el nombre de Papeles de Panamá no sabíamos que iba a tener esa relevancia: Pensábamos... ¿La gente entenderá que Panamá es un paraíso fiscal?

• Pero tuvo impacto:

Lo importante era hacer entender a la gente qué es una offshore, qué es un paraíso fiscal... están bien los nombres, pero queríamos mostrar una pauta de lo que es una sociedad ofsshore. Es un lujo que una cadena apueste por algo que además es difícil de explicar.

• Cuando un periodista busca una exclusiva ¿es porque él la ha buscado o porque le han buscado las fuentes a él?

Unos buscan a otros. Tú buscas a alguien que te cuente una cosa y alguien te busca para que le escuches. Son dos imanes que llegan a atraerse.

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• Esos que cuentan algo son: ¿arrepentidos, fuego amigo, gente que quiere vengarse?

Quien quiere filtrar algo tiene algún interés, es evidente. A veces desde una venganza o traición, o quiere desvelar algo que le ha molestado... siempre hay algún interés. Es igual que el arrepentido que va a contar algo a un tribunal. Es importante cómo llega la historia, pero es más importante cómo haces tú el trabajo como periodista: cuenta la historia de la mejor forma posible, pasando todos los protocolos y criterios periodísticos.

• ¿Hay algún problema ético a la hora de investigar sobre información robada?

Te respondo igual que hacen los jueces o las fiscalías. En el caso de Hervé Falciani, la hacienda española y la italiana están trabajando con informaciones que tienen relevancia pública y utilidad pública. Los papeles del Pentágono son un material robado, pero tienen relevancia pública. Nosotros nos dedicamos a contar historias que permitan a la gente saber en qué país vive, con quién vive, y a quién votar. Me parece que es relevante publicarlo.

• ¿Enseñan en las facultades cómo investigar y conseguir una exclusiva?

Sí. Al fin y al cabo es una noticia a la que le pones el rótulo de exclusiva porque la cuentas tú y la desvelas tú. Es buscar noticias. Muchas de las cosas que hemos contado igual no tienen la potencia de Panamá o de la lista falciani, pero sí son noticias relevantes.

• ¿Cómo se busca una noticia?

En ocasiones entrevistando a gente. Que alguien te dé un hilo del que tirar para, poco a poco, sacar una historia. Te enseñan en las facultades de periodismo a hacer noticias y por ende exclusivas.

Consorcio de Periodistas y Papeles de Panamá

• ¿Cómo gestiona el Consorcio de Periodistas cada investigación?

En el caso de los Papeles de Panamá o los Papeles del Paraíso la información llegó al diario alemán Süddeutsche Zeitung. Y es como un equipo de fútbol: el capitán es el medio, que nos controla a todos, el consorcio nos dice cómo tenemos que jugar y cada país es un jugador. En España estamos La Sexta y El Confidencial. Cada país se encarga de buscar los nombres que les corresponden a ellos, porque es la mejor manera de analizar toda la información. Estoy convencido de que el nombre de José Manuel Soria nunca se hubiese localizado si sólo hubiesen analizado estos datos los periodistas alemanes.

• ¿Cómo puede un periodista acceder al consorcio?

Es el consorcio el que llama a personas concretas. Ellos eligen a periodistas de su confianza o que pueden darles un buen uso a la información. Esto es enriquecedor personalmente, pero también como medio es prestigioso: hablas con otros medios y también ves cómo trabajan ellos.

• ¿Cuánta gente trabaja en el departamento de Investigación de La Sexta?

Yo coordino un equipo de 2 personas durante todo el año, al que se suma gente cuando nos acercamos a fechas de exclusivas. Con Los papeles de Panamá se sumó otra persona dos meses antes y tres más un mes antes. Las últimas semanas se volcó toda la redacción. Estuvimos un año investigando la información y en ese tiempo hay que mantenerlo en secreto. No puedes hacer partícipe a nadie de la información.

• ¿Cómo es la comunicación entre los periodistas del Consorcio?

Tenemos una especie de Facebook encriptado, donde se va viendo día a día todo lo que se ha encontrado: Alguien que ha encontrado a Messi, al presidente de Islandia... Y compartes lo de unos con otros.

• Antes de publicar un nombre habláis con el afectado ¿por qué?

Tenemos que saber para qué ha utilizado una sociedad: a lo mejor tiene una explicación lógica y está todo limpio. Tenemos gente que nos ha podido dar explicaciones perfectamente contrastadas de a qué se dedica. Nos ha pasado con un español que aparecía en Los Papeles de Panamá, pero porque tiene doble nacionalidad y una empresa allí. Si no es de interés público y no tiene relevancia informativa no lo publicamos.

• ¿Han cambiado las redes sociales e internet la forma de hacer periodismo?

Las redes ahora mismo son fundamentales. Con los papeles de Panamá no hubiésemos podido hacer nada sin internet. Y yo no sabría trabajar sin redes socales ni internet. Puedes saber en minutos quién está detrás de una empresa. Puedes localizar en segundos a una persona implicada en algo, e incluso conseguir su teléfono en nada. No veo más que ventajas y un campo abierto.

Periodismo local

• ¿Qué diferencia hay entre tu actual trabajo y la época en Álava 7?

En Alava 7 hacía un magazine, con muchas entrevistas e información local: algo divertido. En La Sexta hago periodismo del más duro, del que no haces amigos: siempre que cuentas algo afecta a alguien al que no le gusta lo que vas a publicar. Son dos vertientes del periodismo, las dos me apasionan y cada una tiene sus ventajas.

• ¿Se hace buen periodismo local en Álava?

Sí. Yo estuve en Vitoria trabajando 4-5 años. Muchísimas de las cosas las aprendí de compañeros que hacían periodismo local. Me parece apasionante y además sabes que, lo que cuentes, siempre le afecta a alguien. Cuando trabajas en un medio grande se puede perder esa perspectiva en ese momento. En el medio local tienes 100% la perspectiva de que cuentas la historia de una persona, y que te la vas a encontrar por la calle. El periodismo local me apasiona, me divierte muchísimo y me encanta.

• ¿Te planteas volver?

En este momento no me lo planteo, pero nunca se sabe.

• ¿Está mejor o peor el periodismo en Álava que hace unos años?

No tengo perspectiva. Sé que las tv han desaparecido, que las radios tienen menos personal... los tiempos están cambiando pero no tengo perspectiva. Los medios locales son muy duros y la presión que aguantas en un medio local es complicada.

• ¿En qué sentido?

Tienes un trato directo con las fuentes y con las historias que vas a contar. Las llamadas de presión a un medio local son mucho más fáciles a veces que a un medio nacional, que tiene un peso específico y puede luchar. Tener un jefe que te respalde y una cadena o empresa editora que te respalde es fundamental para sacar cualquier información. En un medio local los medios son limitados y, si la empresa editora tiembla, tú tiemblas. Yo tengo la suerte de tener un jefe (García Ferreras) que nos respalda en las informaciones que saquemos.

• Muchos jóvenes se animan a estudiar Periodismo cada año ¿qué mensaje se les puede enviar?

Yo les animo a estudiar periodismo siempre que tengan vocación. Si no la tienes, déjalo. Porque un Jaguar no te vas a comprar. Millonario no te vas a hacer con el periodismo. Te tiene que divertir un poco. Es importante hablar idiomas. Si quieres abrir mente, tener contactos y poder hacer cosas que molen es fundamental el idioma, además de las nuevas tecnologías. Yo hablo Inglés, y en la redacción hay muy poca gente que hable alemán o italiano. Hay poca gente que hable. Si te gusta es un plus que la gente no tiene.