Aluvión de quejas contra Katerin Spa tras su cierre repentino

Nadie contesta al teléfono de Katerin Spa. En el local de la Calle Los Herrán tampoco hay nadie para atender o abrir: hace unos días aparecía un cartel que decía "Cerrado por Vacaciones". Ese cartel ha desaparecido y ahora la opacidad es total en la empresa. Nadie sabe si volverá a abrir o no, aunque las deudas parecen ahogar a la empresa.

Son varios los clientes que se han quejado por esta situación. En Kontsumobide han recibido ya numerosas quejas y han activado un procedimiento para recoger las reclamaciones de todos los perjudicados.

Según ha podido saber Gasteiz Hoy, las razones del cierre están en los impagos a las trabajadoras: impagos que estarían entre los 4 y los 8 meses de nómina. Todas ellas se encuentran ahora mismo en juicios con la empresa, en la que el pasado año se jubiló su propietario. La plantilla se completa con dos hijos de los propietarios, así como la mujer del anterior gerente, que le ha sustituido en la dirección.

En los últimos días se ha podido ver la persiana del centro abierta y luz en su interior. Sin embargo en ningún caso hay atención al cliente. Este centro contaba con numerosa clientela fija. Esta clientela no pagaba cada sesión, sino que adquiría bonos prepago para tratamientos prolongados. Estos bonos actualmente no se pueden canjear, ante la falta de respuesta de la empresa. Por eso Kontsumobide ha recibido numerosas reclamaciones que está estudiando.

Algunos clientes aseguran a Gasteiz Hoy que desde el centro ya se les informó que estaban atravesando problemas, pero muestran su sorpresa por este cierre.

Katerin Spa abrió sus actuales instalaciones en julio de 2008. Es un centro especializado en Fisioterapia, Tratamientos de Belleza y además cuenta con Spa. Anteriormente se encontraba en un local más pequeño en la misma calle junto a Sabeco.

La mayoría de sus trabajadoras lleva más de un lustro en el centro. En el último año algunas trabajadoras abandonaron la empresa, ante la situación de inestabilidad existente. Los impagos se venían sucediendo de forma ocasional desde 2012, aunque hasta 2015 no comenzaron a ser algo constante.

Su viabilidad actual parece complicada, ya que a los impagos a las trabajadoras se le unen los bonos que deberían canjear sus clientes. Unas deudas acumuladas que habrá que ver si finalmente permiten al recinto reabrir.

*Gasteiz Hoy ha intentado contactar sin éxito desde el pasado viernes con los dueños de Katerin Spa pero, como ocurre con los clientes, no responden a las llamadas ni abren la puerta.