VÍDEO - La avenida que nunca fue (ni será) en Salburua
La Avenida Capital de Euskadi rompe con cualquier lógica urbana: ¿cuáles son sus peculiaridades?
Salburua alberga una vía que desafía toda lógica urbana: la Avenida Capital de Euskadi. A simple vista su nombre sugiere una vía importante, pero la realidad es muy diferente.
Esta avenida no es como las demás: está literalmente partida en dos por las vías del tren, las cuales la dividen en dos tramos independientes. Las conexiones entre ambas partes son limitadas y se reducen a varios pasos inferiores ubicados en la calle Antonio Amat Maiz y el Bulevar de Salburua además de un puente peatonal. ¿Pero qué hace que esta avenida sea tan especial? ¿Qué particularidades la distinguen?
Ver esta publicación en Instagram
Dos mitades, dos realidades
A primera vista, las dos partes de la avenida parecen comunes: bloques de pisos y aparcamientos como cualquier otra calle. Pero pequeños detalles revelan su singularidad.
Lo primero que llama la atención es la estrechez de las aceras junto a las vías del tren. Unas aceras que son tan angostas que apenas permiten el paso de una persona.
Otro detalle es que los dos lados de la avenida se terminan abruptamente. En un lado la acera simplemente desaparece, mientras que en el otro los peatones se enfrentan a campos abiertos y un muro de tierra. Esto crea una diferencia palpable entre lo que en su momento se imaginó como una avenida y lo que es realmente.
¿Por qué está diseñada así la avenida?
El diseño de esta avenida tiene su origen en la planificación de Salburua, un barrio diseñado para que las vías del tren, en teoría, no fueran un obstáculo para el desarrollo urbano. Sin embargo, en la práctica, la línea ferroviaria se ha convertido en una barrera que corta la avenida en dos.
Lo más curioso es que, a pesar de estar separadas, ambas mitades conservan el mismo nombre: Avenida Capital de Euskadi. Este detalle refuerza la sensación de un proyecto urbano sin terminar donde las expectativas iniciales no llegaron a cumplirse.
"Vertedero ilegal y acera inutilizable"
A esta peculiaridad urbana se suma otro problema: el abandono. Los vecinos denuncian que uno de los tramos, en particular el camino de Trianas-Salburua, paralelo a las vías del tren, se ha convertido en un "vertedero ilegal".
En febrero, Elkarrekin alertó sobre la acumulación de residuos en esta zona como electrodomésticos, aparatos electrónicos, neumáticos, restos de obras y envases plásticos abandonados, entre otros enseres.
Asimismo, a finales de noviembre una comunidad de vecinos presentó una queja formal ante ADIF por el "crecimiento descontrolado" de vegetación en la acera. Unas plantas que han invadido la ya de por sí estrecha acera, por lo que dificulta el paso de los peatones.
La avenida es, en definitiva, un recordatorio de un diseño urbano interrumpido. Quizás, en el futuro, el diseño de la ciudad logre corregir esta anomalía para conectar finalmente los dos lados. Hasta entonces la vía será conocida como 'la avenida que nunca fue'.
noticia anterior
Los menores de 6 años también tienen dentista gratis
Desde noviembre, Osakidetza ofrece consultas gratis en los propios ambulatorios a txikis de 0 a 6 años
noticia siguiente
Venezolanos protestan en Vitoria contra Maduro
Un reducido grupo de venezolanos denuncia la "violencia y persecución" que se vive en su país