La elevada presencia policial marca unas 'no fiestas' sin apenas incidentes
Hosteleros critican el "espectáculo" de las intervenciones policiales
Las no fiestas de La Blanca concluyen esta madrugada. Lo hacen con una sensación de que, en general, se han respetado las cuestiones sanitarias: ha habido multas por consumir en la calle o por pasear sin mascarilla, pero han sido situaciones puntuales. Además hubo tres intervenciones en discotecas por haber gente bailando o sin mascarilla, y también se precintaron dos establecimientos por positivos de trabajadores.
Al mismo tiempo, en torno a la medianoche, algunas zonas de Nueva Fuera, Zapatería y Cuchillería han registrado aglomeraciones de gente arremolinada en torno a la entrada de algunos bares y pubs concretos. Pero en la mayoría de bares y restaurantes se han cumplido en general las normas sanitarias establecidas: grupos de hasta 10 personas, 1,5 metros entre grupos o mesas y uso de mascarilla si no hay consumición.
Más policía que nunca
Las fiestas concluyen con la sensación de que las calles han contado con mayor presencia policial que nunca. Patrullas de Policía Local y Ertzaintza han recorrido las calles de la ciudad a todas horas: en moto, a pie o en vehículos. Una imagen que se ha repetido en prácticamente todas las calles.
Este mayor número de agentes ha desatado críticas entre quienes consideran que no se realizan los mismos dispositivos para evitar robos, hurtos, ocupaciones u otros delitos que se producen habitualmente en nuestra ciudad.
Plaza tomada en Celedón
La elevada presencia policial fue evidente el mismo 4 de agosto. El fuerte dispositivo, con numerosos agentes de paisano y uniformados en el interior de la Virgen Blanca, dejaba ver una imagen de una plaza vacía completamente tomada por la policía. Los agentes no estaban solo en los accesos vallados, también estaban dispuestos a lo largo de una plaza cerrada, en muchos casos policías de paisano. A lo largo del programa que emitimos el pasado martes se puede ver esta presencia policial.
La presencia policial se ha hecho evidente en el centro de la ciudad y el Casco Viejo. Pero también en el exterior. Patrullas que han vigilado especialmente el uso de mascarilla en la vía pública.
Policía Local también ha controlado, boletín de multas en mano, si los hosteleros contaban con las terrazas necesarias o tenían más de las colocadas. Una vigilancia constante que ha generado numerosas críticas en la hostelería y también en parte de la ciudadanía: en algún establecimiento las visitas se sucedieron el 5 de agosto prácticamente cada hora para revisar si las mesas estaban correctamente colocadas.
La actuación policial ha continuado por las noches, a partir de la 1:30. En ese momento, con el cierre de los bares, llegaba el 'barrido' de Zapa, Kutxi, Nueva Fuera, Pinto y Nueva Dentro. Calles de fiesta por las que cada día ha pasado una comitiva policial con varios furgones y agentes a pie. Un desalojo total de la calle realizado con una notable espectacularidad. Tan solo una de las noches hubo tres detenidos.
"Espectáculo en los cierres"
Los hosteleros critican además el "espectáculo" en los precintos del local de Casco Viejo y del Ensanche: precintos que llegaron con un importante despliegue policial, generando preocupación entre quienes allí estaban y los de alrededor. Además, los hosteleros preguntaron en varias ocasiones sobre la necesidad de abrir o no tras detectarse los positivos. La orden de cierre en el local de Pintorería llegó a las 19:00 del 4 de agosto, un momento de gran afluencia, y tras días en los que el local había intentado saber si podía abrir o no.
El vicepresidente de SEA Hostelería, Juan Carlos Antolín, explica este domingo en El Correo la situación de este local de Pinto: "Dos cocineras dejaron de acudir al local, por lo que cerró la cocina. Solo abrió el local para vender copas el día de Celedón. Podían haberle avisado antes por teléfono y decirle no abras que vamos a precintar. Mientras estuvo cerrado nadie se presentó allí ¿Esperaron a que abriese?".
La misma situación ocurrió en el Xixilu, cuando el propio establecimiento sabía desde días atrás del positivo de un trabajador y preguntó a las autoridades el protocolo a seguir. La respuesta no llegó hasta el día 5, con numerosas patrullas en el lugar, sin ningún comunicado previo por teléfono.
Al mismo tiempo el responsable de la discoteca en la que se multaron a 23 personas denuncia que se multó de forma indiscriminada a toda la clientela: "Había 4 personas en la barra bailando, pero las otras 19 estaban sentadas". La actuación policial se dio a la 1:20 cerca del cierre. Muchas de las personas tenían ya la consumición agotada y por ello fueron multadas, pese a estas sentadas, asegura el responsable de este local de San Antonio. También cuestiona las multas en un local donde únicamente había 23 personas, separadas entre sí por grupos. 8 personas estaban trabajando en el local para las 23 personas.
Concluyen las no fiestas y habrá que ver ahora qué ocurre con la presencia policial: si se mantiene o, por el contrario, vuelve a los niveles de antes del Día del Blusa.
noticia anterior

La senda verde del Délika te lleva a los pies del Salto del Nervión
La nueva Senda Verde del Delika se ha adaptado para permitir llegar hasta la parte alavesa del Salto del Nervión
noticia siguiente

43 positivos en Álava en las últimas horas
El cribado de Agurain detecta dos positivos entre los 113 tests realizados