La enseñanza pública vivirá 23 días de huelga en los próximos meses

12 enero, 2018

Habrá tres jornadas de paro general y una semana de paro por cada uno de los sectores (docentes, Educación Especial, Haurreskolak y 'Cocina y Limpieza)

La enseñanza pública vivirá de nuevo varios días de huelga entre marzo y junio, convocados por ELA, LAB y STEE-Eilas. Numerosos paros encaminados a conseguir las reivindicaciones de los trabajadores. Habrá dos jornadas de paro general los días 14 y 15 de marzo, cuatro semanas de movilizaciones sectoriales en mayo y un último paro general en junio. Las últimas jornadas tuvieron un masivo respaldo de los trabajadores. Los sindicatos han decidido retomar las movilizaciones porque consideran "insuficientes" y parciales las propuestas realizadas desde el Departamento de Educación a sus reivindicaciones.

Desde el Departamento de Educación consideran estos paros "inadmisibles": "Los sindicatos convocantes pretenden tomar como rehenes a las miles de familias que confían en la enseñanza pública, con el objetivo de reivindicar mejoras laborales" asegura la Consejera de Educación.

Los convocantes justifican estas convocatorias por las "severas políticas de recorte, la vulneración del derecho a la negociación colectiva, la reducción de plantillas, el aumento de cargas de trabajo; la precarización del personal de educación; la escasez de medios en los centros; el empeoramiento de las infraestructuras; el deterioro de los servicios públicos y su privatización".

Los sindicatos piden aumentar de modo significativo la inversión del Gobierno vasco en la Educación Pública y elevar en 2.000 personas la plantilla reduciendo al mismo tiempo la temporalidad al 6%. Actualmente la temporalidad de los docentes está en el 38%.

Otra de las demandas está en el descenso de un 10% en el ratio de alumnos por aula, aumentar un 15% el salario para recuperar el poder adquisitivo perdido y realizar las sustituciones desde el primer día en todos los casos. Actualmente, en la mayoría de los casos, no se realiza hasta pasada una semana.

Por último reclaman frenar la Lomce y Heziberri e insistir en la inmersión lingüística.