La nueva vida de Kona
Esta gata siamesa apareció en un coche del concesionario de Hyundai y una clienta la adoptó
Kona ya tiene un hogar. Esta gata siamesa de apenas tres meses apareció sola en el concesionario Autolasa de Alto de Armentia. Los maullidos empezaron a escucharse en la noche del jueves 19, al terminar el acto de presentación del nuevo modelo Hyundai Kona. "Escuchábamos los maullidos, pero se callaba al acercarnos cerca de su posición", comentan desde el concesionario.
Al día siguiente siguieron con la búsqueda, pero no fue hasta las 15:00 cuando los mecánicos dieron con ella: se había escondido en los bajos de un coche aparcado en el exterior, junto al tubo de escape. "Estaba hambrienta. Fuimos a por una buena lata de comida y ya fue cogiendo fuerzas", explican desde el concesionario. La comida le hizo recuperar fuerzas y, desde ese momento, fue el centro de atención del concesionario: "No dejaba de maullar, con suerte para ella".
Y es que esos maullidos llamaron la atención de Lina, una clienta que ese día había ido a recoger un nuevo vehículo. "Nos pidió verla y fue amor a primera vista. No dudó ni un momento en darle un hogar". Y allí mismo la bautizó como Kona, nombre del modelo de Hyundai que el concesionario alavés había presentado el día que empezó a escuchar los maullidos. Martha estuvo en su día como casa de acogida. y por eso decidió llevársela.
🐱🚘
Este gatito estaba escondido en los bajos de un coche en un concesionario.
Ahora tiene un nuevo hogar 👇https://t.co/3BY8xEIAE6 pic.twitter.com/8Ugbex0bmR— Gasteiz Hoy (@gasteizhoy) October 30, 2023
Ahora la gata está en Sondika, en casa de Naty, la hermana de Martha. Fue ella quien el mismo sábado se encargó de Kona. Ella tiene ya dos gatos adultos. El mismo sábado la trasladó a la clínica para realizar las primeras exploraciones y las curas: "Tenía las patas y los bigotes quemados". Unas heridas de las que se recupera sin problemas. De hecho Kona corre ya por su casa, aunque está en la cuarentena obligada por ser un gato callejero, a la espera de los distintos análisis.
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La de Kona no es, en cualquier caso, la única anécdota gatuna del concesionario en los últimos días. Otra clienta que venía desde Galicia transportó durante todo el recorrido a otro gatito que se había resguardado en el interior del motor. Tuvo suerte en este caso de refugiarse bien para así sobrevivir. Y es que con el mal tiempo los coches son un refugio para muchos de los gatos callejeros.
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