La Plaza Porticada sigue esperando un uso para los locales municipales

24 enero, 2012

El Ayuntamiento adquirió en 2007 los ocho locales situados bajo las torres de Mariturri para abaratar el precio del proyecto

El Ayuntamiento de Vitoria lleva meses planeando ahorrar costes, a través de, entre otras cosas, la unificación de sus oficinas. Busca reducir los alquileres que tiene que pagar. Y es que muchas de sus dependencias se encuentran en propiedades que no son suyas.

Pero el Ayuntamiento también es propietario de numerosos locales en todo Vitoria. Locales que, en algunos casos, cede a terceros, y en otros aprovecha para instalar allí algunos de sus departamentos.

En el Barrio de Mariturri, al oeste de Vitoria, el Ayuntamiento cuenta con ocho locales que llevan vacíos desde que se construyeron. Son  los ubicados bajo las torres de la Plaza Porticada. El Ayuntamiento adquirió estos locales en marzo de 2007 para ayudar a los cooperativistas a rebajar el precio de cada piso. Un precio que, incluyendo los locales, se disparaba por encima del valor de una VPO. En algunos casos, superaba los 200.000 euros.

Ello fue debido a que las cooperativas tuvieron que asumir un diseño que les fue impuesto desde el Ayuntamiento. El consistorio cedió el suelo a ocho cooperativas, cada una de las cuales debía construir una torre aislada, pero siguiendo los planos municipales, para que todas ellas tuvieran el mismo patrón. Pero el elevado coste del diseño hacía inviable su construcción a precio de VPO, según aseguraron los cooperativistas. Por ello, el Ayuntamiento, que renunció a cambiar el proyecto elegido, compró todos los locales, para abaratar así el precio de cada una de las viviendas.

Esta decisión del ayuntamiento y de Ensanche XXI, tomada en la época de Alfonso Alonso, permitió rebajar el precio que los cooperativistas de esas parcelas tenían que pagar por cada piso. Aunque, aún así, en algunos casos se siguió pagando un precio superior al de una VPO. Una decisión que trajo bastante polémica, y que desde otras cooperativas de viviendas no se entendió, ya que lo veían como un trato de favor.

Interior de uno de los locales de la Plaza Porticada

La plaza estaba llamada a ser el epicentro de la vida en el barrio, como se intentó también con la Plaza de Zumaia en Lakua. En cualquier caso, pasados dos años casi de la entrega de las últimas viviendas la Plaza Porticada sigue siendo hoy una plaza muerta, vacía, en la que no existe vida. Y ello es debido principalmente a que el Ayuntamiento mantiene en propiedad dichos locales, pero no les ha dado ningún uso. Los vecinos denuncian que no se les permita instalar allí la Asociación de Vecinos de Mariturri.

Unos locales que el Consistorio podría optar por vender, por arrendar o, simplemente, por utilizar con la instalación allí de oficinas ubicadas ahora en espacios alquilados a terceros. Mientras tanto, la Plaza Porticada no dejará de ser una plaza de paso.