Las carreras vuelven a Jundiz
Las carreras ilegales de coches que hace casi un lustro se celebraban en Jundiz han vuelto. Mas de 100 coches se pudieron contar el pasado viernes en una más de estas citas que los aficionados a los automóviles han vuelto a convertir en rutina. En realidad, no se trata tanto de carreras ilegales, como de […]
Las carreras ilegales de coches que hace casi un lustro se celebraban en Jundiz han vuelto. Mas de 100 coches se pudieron contar el pasado viernes en una más de estas citas que los aficionados a los automóviles han vuelto a convertir en rutina. En realidad, no se trata tanto de carreras ilegales, como de maniobras con los coches para el disfrute de los allí congregados. Muchos de estos vehículos son de alta cilindrada, y no son pocos los que vienen de fuera de Álava.
Los aficionados a los coches se reúnen, desde hace varios meses, en la zona más oeste de Jundiz, junto al pueblo de Margarita. Allí cientos de personas de todas las edades se reúnen viernes tras viernes, a partir de las 23:00, y hasta que la Policía Local hace acto de presencia. En el caso del pasado viernes, los agentes locales aparecieron poco antes de la medianoche, bloqueando la recta principal en la que se producen las derrapadas y los acelerones.
Es entonces cuando los allí congregados, como suelen hacer de manera habitual, se trasladan hasta el polígono de Los Llanos, en Nanclares de la Oca. Allí los municipales no tienen competencias, y es la Ertzaintza quien tiene que acudir a evitar que se produzcan estas aglomeraciones.
Las carreras ilegales de coches, que empezaron a celebrarse en 2004 en las calles de Jundiz, tuvieron su punto culmen en torno a 2007. Durante varios meses se produjeron varios encontronazos entre automovilistas y policía, que acabaron con una carga policial. Desde entonces, las carreras, con mucha menos aglomeración, se celebraron en el Buesa, en la Rotonda de Urssa o incluso en Gojain.
Pero con la llegada del otoño, han vuelto al lugar en el que empezaron, en el polígono industrial de Jundiz. Y la afluencia de personas aumenta semana tras semana, ávidas por oler el aroma de caucho quemado. Y no les amedranta la presencia de cámaras en la Zona de Margarita. Acuden allí a ver demostraciones ilegales, y que en ocasiones llegan a representar un peligro para espectadores y conductores. Este mismo fin de semana, sin ir más lejos, un Opel Astra provocó un momento de peligro al salirse de la calzada mientras realizaba una pirueta. Una situación que se saldó sin consecuencias de importancia.
La notoriedad de estas carreras para los aficionados a las cuatro ruedas es bastante importante. Por ello, desde los propios congregados se demanda desde hace años la construcción de un circuito en la Llanada Alavesa, un proyecto acariciado durante años pero por el que nunca se ha apostado decididamente.
Mientras tanto, el problema y el peligro sigue presente en Jundiz o en Los Llanos. Dos zonas industriales en las que lo único que cuenta es el espectáculo que pueden ver en el siguiente video:
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