Los agricultores temen que las grandes bodegas paguen menos por la uva

19 septiembre, 2020

Algunas de estas bodegas han recibido importantes ayudas económicas

El diputado general de Álava, Ramiro González, ha visitado esta semana Rioja Alavesa para ser testigo del inicio de la vendimia, una labor mediatizada por la COVID-19 y las medidas fijadas para garantizar la seguridad. El máximo mandatario foral ha acompañado a Bodegas Loli Casado en la recogida de uva blanca, una ocasión que ha querido aprovechar para lanzar un mensaje de “responsabilidad y compromiso real” a las grandes bodegas de la Denominación de Origen Rioja para establecer los precios de la uva que pagarán a sus agricultores proveedores.

Son muchas las bodegas que están obligando a los agricultores a tirar los precios para comprarles la uva. El descenso en el consumo de vino ha provocado un excedente de uva sembrada y recolectada. Y las bodegas se están aprovechando de estas medidas, pese a que muchas de ellas han recibido ayudas públicas. El precio de la uva está regulado, y no se permite comprar o vender por debajo de coste. Pero existe un margen, y los bodegueros se están aprovechando para tirar a la baja los precios.

Uva rioja alavesa

“Todos somos conscientes de que nos encontramos en unas circunstancias realmente complicadas, con una importante disminución de las ventas, pero esta situación no puede desembocar en un sometimiento de los viticultores y viticultoras”, ha señalado González, “reitero la necesidad de un pacto social para una salida conjunta de esta difícil situación, evitando en la medida de lo posible que los precios puedan fijarse desde posiciones de dominio intolerable por algunas bodegas”.

El diputado general ha recordado que en los últimos meses muchas bodegas con gran volumen de ventas han recurrido a las ayudas puestas en marcha por, por ejemplo, el Ministerio de Agricultura. “Algunas han recibido importantes sumas de dinero, cientos de miles de euros, en concepto de ayudas para almacenaje, subvenciones públicas que deberían tener repercusión en las cantidades que destinarán a la compra de uva”, ha explicado.

Y es que el representante foral asegura que “los y las agricultoras son conscientes de la situación que rodea a las bodegas”, pero que no creen que la bajada de ventas tenga que repercutir totalmente sobre ellos, “sobre todo cuando la caída se ha visto suavizada durante las últimas semanas”.

“Es injusto, además, que en un año tan tremendamente complicado como éste, sean sólo las personas agricultoras quienes soporten que el Consejo Regulador haya disminuido el porcentaje de uva amparada por hectárea para reducir los stocks de vino y mejorar la calidad, lo que significa la misma inversión por parte de la persona agricultora y una recogida de kilos notablemente menor”.