Maccabi gana al Baskonia en su terreno

Maccabi ganó al Baskonia en su terreno. No por haber ganado en Vitoria-Gasteiz (que también) sino por la manera en la que lo ha hecho. Con defensa, adaptándose al juego del Baskonia y anulando las virtudes de los azulgrana. Es un equipo explosivo, pero ha demostrado que también sabe defender. Su victoria ha roto la racha de cuatro triunfos de un Baskonia mucho más plano que en otras citas.

Los israelíes llevaron la iniciativa del juego todo el encuentro, excepto en el primer cuarto. Usaron los 10 primeros minutos para entender el juego del Baskonia y después se adaptaron a él. Maniataron a los tiradores azulgrana, corrieron cuando pudieron y anularon el ataque baskonista en los momentos importantes. Baskonia llegó a los últimos 30 segundos con 2 abajo en el marcador, pero Dorsey sentenció el choque con dos tiros libres tras capturar un rebote ofensivo.

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Alec Peters y Scottie Wilbekin no estuvieron acertados en el día de hoy. Foto: Maccabi Tel Aviv

Los azulgrana acusaron la baja de Vildoza, que volvió a quedarse fuera por su lesión de espalda. Pero lo que de verdad influyó en la derrota fue el escaso acierto exterior (18% en triples). Los azulgrana casi nunca lanzaban sin oposición, pero tampoco eran capaces de rompe la defensa rival para provocar esos desajustes. Echaron en falta sobre todo el acierto de Alec Peters y Rokas Giedraitis, con 4 puntos cada uno.

Para contrarrestar estuvieron Polonara y Fall, aunque no fue suficiente. El italiano se echó el equipo a la espalda y aportó en todos los aspectos: registró 15 puntos, 8 rebotes y 6 asistencias para 28 de valoración. El senegalés se quedó en 14 puntos y 6 rebotes. Por eso sorprendió su ausencia en los últimos minutos del partido.

En el Maccabi el máximo anotador fue Tyler Dorsey con 15 puntos. Aunque el jugador más decisivo fue para Othello Hunter: con 12 puntos y 5 rebotes el pívot fue un dolor de cabeza para los interiores locales tanto en defensa como en ataque.

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Intensidad decreciente

Baskonia comenzó el partido con intensidad. Y donde está la palabra intensidad también está la palabra Polonara. El italiano se movió como pez en el agua en unos primeros compases mucho más activos por parte del Baskonia. Anotó 7 puntos en el primer cuarto y lideró una defensa igual de efectiva que la de últimos partidos europeos.

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El problema era que esta defensa no iba a ser tan duradera como en otras noches. Comenzó a romperse por dentro, con Othello Hunter cogiendo rebotes y anotando canastas primero a Fall y luego a Jekiri. Dusko estaba tan molesto que incluso sacó a Diop, inédito en los últimos partidos de Euroliga. Pero el ex del Real Madrid seguía haciendo daño.

El que no apareció demasiado era Wilbekin, muy tímido en la primera mitad (5 puntos). Aunque Maccabi tenía más armas  Tyler Dorsey estaba más acertado (8 puntos sin fallo) y todos los jugadores visitantes menos Omri Casspi habían anotado ya al descanso.

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Y es que Baskonia dominó en el primer cuarto (20-12), pero lo contrario sucedió en el segundo. Los de Ivanovic bajaron prestaciones en defensa y Maccabi dio la vuelta al marcador anotando 25 puntos en el periodo (13-25). Los azulgrana fallaron muchos tiros y concedieron más opciones de contragolpe al cuadro israelí, que tampoco se piensa demasiado los ataques.

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El primer cuarto fue azulgrana y el segundo amarillo. Le tocó al tercero estar en tierra de nadie, aunque lo cierto es que los isralíes estaban algo más cómodos que los locales. Baskonia sufría más para anotar debido a su bajo porcentaje en triples (21%) y a la baja aportación de sus tiradores. Entre Giedraitis y Peters solo llevaban 4 puntos. Acabaron con 8 en total.

Salió Dragic al rescate, sacando faltas y penetraciones que rompían la hoy férrea defensa macabea. También Fall en las segundas oportunidades para recortar algo la diferencia. Aunque los de Sfairopoulos se marcharon con ventaja mínima al último asalto (54-56).

El pulso y la emoción se mantuvieron hasta el final. Lo sorprendente fue que el Maccabi supo adaptarse del todo a un partido embarrado en los últimos minutos. Algo que quizá sería más favorable a Baskonia por su buena defensa, pero en esta ocasión no fue así.

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Es cierto que Baskonia tiene problemas para jugar en estático, pero los visitantes tampoco mostraron mucha más brillantez. Lo que sí tuvieron es un nivel defensivo muy bueno en los últimos minutos, dejando sin opciones a un ataque azulgrana algo plano. Solo un triple de Polonara dio opciones al Baskonia en los últimos instantes (63-65).

Quedaban 30 segundos y Maccabi tenía bola para sentenciar el partido. No lo hizo, pero cogió (una vez más) el rebote ofensivo que le dio la victoria, una vez que Tyler Dorsey metió los tiros libres. La derrota es sexta en la temporada europea de los azulgrana, que les deja con récord neutral (6-6) y fuera del top 8 por esta jornada.