Manu García logra el empate para el Alavés en el último minuto

El Deportivo Alavés consiguió arrancar un punto en el Calderón, al empatar a 1 contra el subcampeón de la Champions League. Lo hizo además en el último minuto, de la mano del capi vitoriano Manu García, cuando parecía que la victoria era para los rojiblancos.

El equipo de Simeone controló el partido, pero los albiazules supieron resistir con un gran Pacheco en la portería y un gran trabajo defensivo atrás. Feddal tuvo que ser sustituido en los primeros minutos por lesión. Laguardia tomó el mando y supo frenar los ataques rivales junto al resto de la zaga.

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Pellegrino reconoció la superioridad del Atlético de Madrid, hasta el punto de asegurar que el Alavés no se merecía el empate: "No merecimos empatar, pero el fútbol es eficacia, no es merecimiento".

Aún así el 0-0 se mantuvo en el marcador hasta el minuto 90, cuando el árbitro pitó un penalty en contra para el Alavés. Kevin Gameiro, fichaje estrella del Atleti, fue el encargado de convertir la pena máxima. Parecía que los madrileños tenían la victoria amarrada, pero el Glorioso volvió a resurgir, y lo hizo de la mano de su capitán.

Manu García lograba en el último minuto el empate, y lo hizo con un zambombazo desde lejos, fuera del área y cuando había varios jugadores de Alavés y Atleti por delante. Un gol que representa el espíritu del Alavés, con un capitán vitoriano que llegó al Glorioso cuando estaba en Segunda B, ha vivido dos ascensos y ahora juega en Primera con el equipo de su vida.

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Llegó al Alavés en 2°B. Ha logrado 2 ascensos. Hoy ha marcado el 1er gol de su equipo en la vuelta a 1°. MANU GARCÍA pic.twitter.com/cnnFrq3gXq

— LaSegundaB (@LaSegundaB) 21 de agosto de 2016

Un gol que Manu García achacaba a la suerte. El capitán agradecía el trabajo colectivo, al tiempo que destacaba la gran defensa de los albiazules, capaces de frenar la superioridad atlética. Pellegrino defendía, mientras tanto, que el Alavés jugó bien tan sólo los primeros 30 minutos, adaptándose posteriormente al juego del rival: "Hemos jugado unos 30 minutos del primer tiempo como hemos querido y el resto hemos jugado más como hemos podido".

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El Alavés estuvo además acompañado por medio millar de aficionados que se hicieron notar en un Manzanares que no estaba lleno. Los aficionados, distribuidos por el campo, pudieron al final celebrar el empate como si de una victoria se tratara.

Un primer punto que vale mucho para el Alavés, una demostración de carácter y de garra en una temporada en la que el objetivo es mantener la categoría. Este domingo el Alavés demostró que puede luchar de tú a tú con los grandes de La Liga, aunque la escuadra albiazul aún está en periodo de adaptación de los nuevos jugadores.

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