Maroto propone una bajada de impuestos y el PNV denuncia la subida de la basura

27 abril, 2015

La precampaña no se da un respiro ni siquiera el 27 de abril. Pese a que los vitorianos que no se han ido de vacaciones están pensando en caracoles, perretxikos y tamborradas, los políticos siguen a lo suyo. Hoy volverán a pelearse por aparecer los primeros en la foto, en las escalinatas del Palacio de […]

La precampaña no se da un respiro ni siquiera el 27 de abril. Pese a que los vitorianos que no se han ido de vacaciones están pensando en caracoles, perretxikos y tamborradas, los políticos siguen a lo suyo. Hoy volverán a pelearse por aparecer los primeros en la foto, en las escalinatas del Palacio de la Provincia. Y esta mañana era el turno de nuevos actos políticos.

Mientras tanto PNV y PP han realizado esta mañana actos de campaña. Javier Maroto ha prometido hoy una bajada de impuestos para todos los vitorianos a lo largo de la próxima legislatura. El PNV, por su parte, ha denunciado la subida de las tasas de basura a las cuadrillas de Álava, fruto de la amenaza de la Unión Europea de denunciar al Ayuntamiento.

El alcalde de Vitoria y candidato por el PP a la reelección, Javier Maroto, ha asegurado esta mañana que va a bajar los impuestos municipales a todos los vitorianos, si vuelve a ser alcalde de Vitoria. “Cuando digo que voy a bajar los impuestos no quiere decir que lo voy a intentar sino que los voy a bajar; y no algunos, sino todos los impuestos”, ha dicho Maroto. Según Maroto, “es el momento de bajar los impuestos a todos los vitorianos” porque “tenemos un Ayuntamiento saneado y los servicios públicos garantizados”.

Maroto ha destacado la importancia de esta propuesta fiscal para los próximos cuatro años “porque afecta al bolsillo de la gente”, y sin embargo “ningún candidato a alcalde ha hablado a día de hoy de política fiscal”, ha apostillado.

El alcalde se ha comprometido también a continuar “buscando toda la financiación de cualquier Administración para conseguir inversiones” y, además, se ha mostrado confiado en que “la situación económica va a mejorar” y por tanto “la Diputación Foral de Álava tendrá más recursos para repartir entre los Ayuntamientos”.

Basurazo a las cuadrillas

El Ayuntamiento ha notificado recientemente a las cuadrillas que, desde ahora, deberán llevar la basura a la planta de residuos de Júndiz en lugar de a Gardelegi. Esta situación supone una apuesta por el reciclaje y llega tras la advertencia de Europa, quien ha amenazado al Ayuntamiento con una multa por permitir la entrada de basura en bruto. Sin embargo, el PNV denuncia que también supone la subida de un 52% en la tasa de vertido de residuos. El Ayuntamiento se ha ofrecido ya a realizar un diálogo con las cuadrillas para poder asumir dicho incremento, pero el PNV ha cargado contra esta situación.

El cambio en la tasa, de Gardelegi a Júndiz, forzará a las Cuadrillas a pagar 68,56 euros por tonelada de residuo entregada cuando hasta ahora eran 45,05 euros.

“Este modo de hacer las cosas es un completo abuso. Abuso en las formas, saltándose los plazos y canales habituales para comunicar una decisión de este calado de forma precipitada, y abuso en el fondo, subiendo de golpe un 52% la tasa de vertido a unas cuadrillas que no tienen capacidad económica para hacer frente a este pago totalmente imprevisto y absolutamente injusto”, ha señalado el portavoz nacionalista, Gorka Urtaran.

El portavoz nacionalista ha reclamado al PP un aplazamiento de esta medida para dar a las Cuadrillas el plazo necesario para adaptar su logística de recogida de basuras al cambio de ubicación.

En este sentido, Ramiro González plantea dos propuestas para que el cambio en el sistema de gestión de residuos del Territorio se haga de forma razonable y ecuánime. En primer lugar, permitir que la subida del recibo de basuras que las Cuadrillas de Araba van a tener que repercutir a sus vecinos se pueda hacer de forma progresiva, con un incremento anual máximo del 10% en la tasa. Por otra parte, González propone que la Diputación Foral de Álava compense aquellos ayuntamientos a los que este cambio suponga un mayor coste de operatividad, de forma que no se produzcan desequilibrios entre las Cuadrillas y el recibo que se gira en cualquier municipio sea equitativo.

La reacción de las Cuadrillas de Araba no se ha hecho esperar y han remitido a Javier Maroto una solicitud para dejar sin efecto el cambio en el sistema de gestión de residuos hasta que acabe del presente ejercicio, de modo que puedan adaptarse con tiempo suficiente al nuevo requisito que se les marca y el incremento de tarifa que conlleva. “Todos somos conscientes de la necesidad de reubicar el traslado de residuos del territorio de Gardelegi a Jundiz. Sabemos desde hace años que la normativa europea nos obliga a ello, pero un cambio de este tipo no se puede hacer de una forma tan precipitada, abusiva y arbitraria. También hay que tener en cuenta que la planta de Jundiz se financió gracias a un convenio en el que participó la propia Diputación, un convenio por el que obligatoriamente el Territorio tiene que tener voz y voto a la hora tomar decisiones de este calado”, argumenta Ramiro González.