Más de 40 personas conviven ya en el Hogar de Bultzain

18 febrero, 2013

Satur García publicará en las próximas semanas su propia biografía

Logo BultzainUn hogar donde acoger a "lo peor de lo peor". Así es Bultzain, el hogar puesto en marcha hace unos años por Satur García y que se encuentra ya prácticamente saturado. Con más de 40 personas en la casa Bultzain mantiene su apuesta por intentar salvar o, por lo menos, ayudar a aquellos a los que no ayudan el resto de instituciones o asociaciones.

Una asociación en la que no valen los perfiles técnicos. En la que los voluntarios aceptan aguantar que aquellos que vienen estén borrachos e incluso se pongan en ocasiones violentos. Pero Satur García asegura que eso es lo que quiere.

Satur publicará en las próximas semanas el libro de su propia vida. Una biografía en la que explicará su decisión de ayudar a los demás, y que estuvo marcada por su abandono en el Asilo Las Nieves a los ocho días de nacer. Tras varios años en el Asilo, empezó su afición a la bebida, y unos años que, como él mismo define, le hicieron ver lo peor.

Tras abandonar antes de los 30 años su relación con el alcohol, Satur optó por dedicar su vida a ayudar a los demás. Desde entonces ha participado en la creación de varias asociaciones. Sus últimos proyectos fueron Bizitza Berria (creado en colaboración con José Ángel Cuerda)  y Bultzain.

Satur insiste en que él no tiene perfil técnico y se compara con el ex alcalde de Vitoria. Insiste en que él no puede participar en organizaciones que ponen trabas y limitaciones en la ayuda a todos los que lo necesitan.

En Bultzain también lamentan que su asociación reciba menos subvenciones que otras como Bizitza Berria. El Celedón de Oro lamenta tener que vivir de la caridad y trabajar con voluntarios. Porque Bultzain sólo cuenta don dos trabajadores propios para las labores administrativas.

Desde Bultzain siguen trabajando además por un nuevo proyecto: un piso en el que, aquellos que puedan hacerlo, convivan de forma totalmente independiente, en un entorno normal y siendo ellos autosuficientes.

Mientras tanto, 40 personas duermen cada noche en el hogar de Puente Alto, pese a que algunas de éstas han conseguido rehabilitarse y quizás tendrían su hueco en otras asociaciones o residencias. La casa se encuentra saturada y la presencia de algunas de las personas se alarga incluso más de lo necesario.

Sin embargo, en Bultzain "no se echa a nadie, cada uno se va cuando quiere". La mayoría de las camas está destinadas a personas que pasan una larga temporada en la casa, aunque también cuenta con colchones para aquellos que acudan de forma temporal. Además, la asociación también intenta pedir la colaboración de los propios acogidos cuando consiguen un empleo, para que financien en lo que ellos puedan o quieran la actividad de la casa.

Satur ha tenido que pelear mucho con las instituciones en los últimos años. Incluso confiesa que muchos creen que él mismo está ganando mucho dinero con estas obras. Algo que él niega y que confiesa no le importa lo que piensen los demás.